Faros de Galicia, un recorrido espectacular
Si tienes decidido lanzarte a la aventura, atrévete con la Ruta de los Faros de Galicia. Este recorrido sigue más de 1100 kilómetros de costa bañada por las aguas del océano Atlántico y del Cantábrico. Descubrirás 44 hermosos faros y localidades marineras llenas de encanto.
Y no solo podrás disfrutar de los faros y las vistas de la costa gallega, también de infinidad de actividades, de viejas costumbres y de una gastronomía deliciosa. Esta ruta es una de las mejores maneras de conocer la región.
Si la realizas al completo, descubrirás los secretos de los casi 80 municipios que forman parte de este mágico recorrido. ¿A qué esperas para organizar tu viaje?
Los faros de Galicia: primer tramo de la ruta
Lo más aconsejable es realizar esta ruta en coche. Así podrás parar en aquellos lugares que consideres oportunos. Para facilitar la visita a los turistas, el gobierno autonómico ha dividido el trayecto en ocho etapas.
La primera va de Ribadeo a Viveiro. En este inicio de aventura se encuentran lugares de sobra conocidos, como la propia villa de Ribadeo o la playa de Las Catedrales. Encontraremos en nuestro paso los faros de isla Pancha, Punta Atalaia y Punta Roncadoira.
La segunda etapa cubre la distancia entre Cedeira y Mañón. Una zona repleta de panorámicas inolvidables, donde los protagonistas son los acantilados.
En esta parte del recorrido se vislumbra el cabo de Estaca de Bares, donde confluyen las aguas del mar Cantábrico y el océano Atlántico. En esta parte veremos los faros de Punta Robaleira y de Candieira.
Entre Ferrol y Cedeira conoceremos las formas de trabajar de un barrio pesquero como es de A Graña. Otros puntos destacados son las preciosas playas de este tramo del litoral, como la de Doniños. De los faros, mencionamos dos: el de Prior y el de A Frouxeira.
Antes de llegar al punto de partida de la siguiente etapa hay que hacer parada en A Coruña para admirar la Torre de Hércules. Es el único faro romano que ha llegado a nuestros días y el más antiguo del mundo aún en funcionamiento.
Segundo tramo del recorrido por los faros de Galicia
En el cuarto tramo de la ruta, entre Malpica de Bergantiños y Fisterra, vislumbramos el faro de Punta Nariga, el último que se ha construido en la costa. En esta etapa destaca la ermita de Santo Adrián, desde donde se pueden ver las islas Sisargas y su faro.
La siguiente etapa va de Carnota a Porto do Son. En Carnota podremos pasear por la playa más larga de la costa gallega. Un punto interesante es el faro de Louro, en Muros, desde donde podemos ver la entrada al mar de la ría. Otro lugar con unas vistas espectaculares es el mirador de A Atalaia, en Porto do Son.
El sexto tramo une Corrubedo y O Grove. En esta parte de nuestra aventura vamos a encontrarnos las marismas de Ribadumia o la telleira de Seixiños en nuestro camino. Nos cruzaremos con el Parque Natural de Corrubedo y el faro de Punta Cabalo.
Una de las etapas más esperadas es la de las islas Cíes. Pero antes, la ruta transcurre por la costa desde la que se vislumbra el archipiélago. Un paseo por Cangas de Morrazo y la playa de Nerga ofrece unas vistas sensacionales de las islas desde la península.
Por último, llegamos al final de Ruta de los Faros de Galicia en las islas Cíes. El recorrido propone un viaje en barco a este lugar para conocer estas fantásticas islas y el famoso faro de mediados del siglo XIX.
Disfruta de la gastronomía gallega
Con una media de dos días por cada trayecto, tenemos la oportunidad de descubrir muchos de los platos tradicionales de Galicia. Lo más tradicional y conocido es el pulpo, así que no pierdas el tiempo e intenta probar todas las recetas que puedas de este manjar.
Al visitar localidades de la costa, podemos encontrar los mejores productos del mar: nécoras, navajas, vieiras, mejillones y un sinfín de productos llenan los menús tradicionales de estos municipios. También encontraremos calamares o anguilas.
Entre los productos que no proceden del mar, destacan las empanadas (que también se hacen con pescado), el lacón, los pimientos de Padrón o el caldo gallego, este último elaborado con grelos, patatas y alubias.