El Círculo de Oro: recorre los paisajes más bellos de Islandia
El Círculo de Oro es una de las mejores rutas que puedes hacer en Islandia. No hay forma más increíble de conocer el magnífico entorno natural de este país. Hasta aquí llegan cada año miles y miles de turistas para practicar senderismo en uno de los lugares más especiales del mundo para hacerlo. Si a ti también te gusta la naturaleza, no dudes en hacer este viaje.
En la ruta del Círculo de Oro podrás ver fabulosos géiseres y volcanes. También impresionantes paisajes con cascadas, glaciares y lagos como protagonistas. Te sentirás como nunca recorriendo un kilómetro tras otro mientras conoces los rincones más espectaculares de Islandia.
¿Cuánto tiempo se necesita?
Lo primero que te preguntarás es cuánto tiempo se necesita para recorrer el Círculo de Oro. No te preocupes porque es posible hacer la ruta en un día. Sin embargo, la belleza de sus paisajes es tan grande que solo podrás disfrutarla plenamente si dedicas algo más de tiempo.
La distancia es de unos 300 kilómetros, por lo que es necesario ir por carretera. Lo mejor es que vayas con alguna ruta guiada o alquiles un vehículo. Es sencillo, lo hace mucha gente y hay varias empresas a tu disposición. El Círculo de Oro está cerca de Reikiavik, por lo que puedes gestionarlo desde la ciudad.
Lo más importante del Círculo de Oro
El Parque Nacional Thingvellir es uno de los espacios más importantes del Círculo de Oro. En este punto es donde se tocan el continente europeo y norteamericano. De hecho, se puede ver la falla que separa cada vez un poco más estas dos placas tectónicas.
Recorrer Thingvellir te llevará horas, pero alberga algunos de los puntos más interesantes del Círculo de Oro. Aquí verás cascadas, ríos y el lago Pingvallavatn, que es el más grande del país.
Y algo realmente espectacular. En el Parque Nacional Thingvellir encontrarás algunas partes de la fisura entre placas en la que puedes practicar el buceo. La limpieza y transparencia del agua facilitan mucho esta actividad, en la que con una mano tocarás Europa y con otra América.
Donde también verás aguas cristalinas es en la cascada Bruarfoss, uno de los lugares más fotografiados de todo el Círculo de Oro. Las vistas que regala son espectaculares por el contraste de colores. El turquesa se mezcla con el azul más oscuro y con el blanco del agua que cae en el desnivel y se crea un efecto único.
Los increíbles géiseres
De Islandia son conocidos los géiseres. De hecho, es un géiser de este país el que dio nombre a este fenómeno, hablamos de Geysir. Se encuentra en el valle de Haukadalur, donde hay un fabuloso completo geotérmico.
Allí es habitual ver a cientos de personas esperar para contemplar asombradas a como el agua en forma de vapor brota con fuerza del suelo y se eleva varios metros en el aire.
Geysir era el más grande de todos, el que superaba los cien metros de altura. Sin embargo, su actividad se vio impedida por los objetos y rocas lanzados por los turistas, pues se creó un tapón que impide la expulsión del agua. Pero aún puedes ver otros géiseres importantes que pueden alcanzar los 20 metros de altura.
Las cascadas y los volcanes
Los géiseres impresionan por su espontaneidad. Pero aunque no lo creas, aún podrás sorprenderte más. Vas a poder contemplar cascadas espectaculares en las que queda más que patente la fuerza de la naturaleza.
La más famosa es la de Gulfoss. Lo es por su extensión, su doble caída y el sonido de la fuerza del agua al caer sobre la roca. En tu ruta por el Círculo de Oro te quedarás con ganas de pasar todo el día admirando este paisaje.
Todavía queda un lugar imprescindible que debes conocer en tu ruta por este impresionante entorno natural. No te pierdas el cráter Kerio. ¿Quién no quiere subir a un volcán? Y más cuando en su interior se pueden ver las coloridas laderas interiores y la pequeña laguna que se ha formado por las lluvias.
Está todo preparado para que puedas acceder al cráter, con un camino exterior y uno interior. Eso sí, para verlo tienes que pagar una cantidad como entrada. En cualquier caso, merecerá la pena para admirar un lugar muy especial de un país tan increíble como es Islandia.