El arte abstracto: la esencia de la realidad

El arte abstracto nos propone formas irreconocibles. Pero sus colores, líneas y geometrías nos pueden sugerir ideas, sentimientos o, simplemente, belleza.
El arte abstracto: la esencia de la realidad
Armando Cerra

Escrito y verificado por el historiador del arte Armando Cerra.

Última actualización: 12 enero, 2020

El arte abstracto supuso una gran revolución en su tiempo. Y aún hoy es un arte incomprendido para muchos. Por ello, vamos a intentar dar unas claves para poder apreciarlo. Además, vamos a descubrir algunos de los artistas más relevantes de este estilo, desde Kandinsky hasta Mark Rothko. ¿Estáis preparados para este viaje estético por el arte del siglo XX?

Definición del arte abstracto

Para empezar, vamos a definir el arte abstracto por oposición. Es decir, el arte abstracto es todo lo contrario al figurativo. No hay representación de cosas en una forma reconocible. La representación nos propone otra realidad. Es lo que los primeros creadores de la abstracción denominaron un arte más puro. Buscaban la representación de la esencia y de las ideas.

Eso sí, cada uno de los artistas más destacados del arte abstracto lo hizo a su manera. Quisieron aportar siempre su visión personal sobre este tipo de pintura que, con el paso de las décadas, ha ido tomando caminos muy variados a base de expresividad, geometría o técnica. Vemos cuáles han sido esos artistas.

Grandes representantes del arte abstracto

1. Wassily Kandinsky

Obra de arte abstracto de Kandinsky
Kandinsky – Wikimedia Comons

A la cabeza del arte abstracto hay que situar al ruso Wassily Kandinsky, autor de la primera obra abstracta. Se trata de una acuarela que hizo en el año 1910. Era la primera vez que de una forma absoluta se presentaban formas totalmente inidentificables, manchas de color informes repletas de dinamismo.

Eran las pinceladas a través de las cuales el artista no buscaba representar nada, sino, sencillamente, dar rienda suelta a sus sensaciones y estados de ánimo.

Aquel cuadro de Kandinsky, donde las formas flotan a su libre albedrío y nada es reconocible, supuso una grandiosa revolución para el mundo del arte. Y a partir de ahí vendrían otros creadores que ahondaron en esa total ruptura con la tradición figurativa del arte.

2. Robert y Sonia Delaunay

Relief-disques de Delaunay
‘Relief-disques’ deRobert Delaunay – Wikimedia Commons

Otro paso importante en el arte abstracto iba a llegar de la mano del matrimonio francés Delaunay. Ellos, en los años siguientes, añadieron a la idea de la abstracción la de los diseños geométricos.

Son obras donde aparecen círculos y líneas siempre con colores uniformes y en diferentes planos, cada uno con su propia luz. Un cuadros que tienen mucho de música por sus armonías cromáticas.

3. Kasimir Malevich

Cuadrado rojo de Malevich
‘Cuadrado rojo’ – Wikimedia Commons

Más o menos en esos mismos años, entre la segunda y tercera década del siglo XX, en Rusia, el pintor Kasimir Malevich iba a dar un paso más en el arte abstracto. Creó el estilo del suprematismo.

Aquí la reducción geométrica es absoluta. Solo pinta un elemento, por ejemplo, un cuadrado. Y no solo eso, solo usa dos colores, o incluso uno. De hecho, su obra más carismática es Cuadrado blanco sobre fondo blanco, de 1918, y que es propiedad del MoMA de Nueva York.

4. Piet Mondrian

Composición en rojo, amarillo, azul y negro de Mondrián
‘Composición en rojo, amarillo, azul y negro’ – Wikimedia Commons

Unos cuantos años más tarde llegó otra corriente emblemática del arte abstracto: el neoplasticismo. Un estilo cuyo máximo representante fue el holandés Piet Mondrian.

Con él todo un lienzo se llena de líneas y ángulos rectas y solo aparecen los colores primarios. Es una pintura que renuncia a cualquier sentimiento y tiene un grandísimo valor decorativo que todavía se mantiene en la actualidad.

5. Jackson Pollock

Jackson Polloc
Jackson Pollock en su estudio- Frits van Heekesen/ Flickr

El estadounidense Jackson Pollock representa la otra línea de experimentación del arte abstracto. Es aquella que se aleja de la geometría y busca la expresión de los sentimientos.

Pollock ha pasado a la historia del arte por sus grandes lienzos pintados con la técnica del dripping, que consiste en dejar caer la pintura verticalmente sobre la tela. Y su estilo tiene una fuerza brutal, de ahí que se denomine expresionismo abstracto.

6. Mark Rothko

Pintura de Mark Rotko
‘Nº 14’ – Naotake Murayama / Flickr.com

Con el movimiento del expresionismo abstracto se ha relacionado a Mark Rothko, artista de origen letón y estadounidense de adopción. Si bien él renunciaba a semejante encasillamiento. Y, de hecho, su pintura es muy diferente a la de Pollock, ya que es una mezcla entre las formas geométricas y lo orgánico.

El suyo es un estilo de lo más personal y que, ciertamente, con el paso del tiempo ha contado con el favor de la crítica. Tanto, que su obra ha alcanzado valores increíbles y cuelga en los más grandes museos de arte contemporáneo, como el Centro Georges Pompidou de París.

De hecho, esto es algo que se puede decir en general del arte abstracto, que, tras unos inicios como revolución creativa, se oficializó e institucionalizó. Incluso, durante décadas, para ser moderno había que ser abstracto, ocultando otras corrientes figurativas. Si bien, hoy en día conviven ambas líneas artísticas.