Un día en el Parque Nacional Seoraksan

Este parque nacional ofrece unas fabulosas vistas, por eso se ha convertido en uno de los favoritos de los habitantes de Corea del Sur.
Un día en el Parque Nacional Seoraksan
María Belén Acosta

Escrito y verificado por la especialista en Asia Oriental María Belén Acosta.

Última actualización: 27 enero, 2021

Queremos enseñaros uno de los parques nacionales más visitados y bonitos de Corea del Sur. El Parque Nacional Seoraksan es una oportunidad de disfrutar del paisaje de montaña del país y un punto obligado para los amantes del trekking y del senderismo.

Algunos datos del Parque Nacional Seoraksan

Se encuentra situado en la península de Corea, en la región de Gangwon. También conocido como Soraksan, fue declarado en el año 1982 Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Esta reserva natural se extiende por un área de más de 163 km² entre las provincias de Injegun, Yanyanggun y Sokchosi.

Cascada en el parque

Con los años, el parque se ha convertido en una de las atracciones más populares entre los amantes de la naturaleza por su belleza natural. En él se encuentra, además, uno de los picos más altos de Corea del Sur: el Daecheongbong, que con sus 1708 metros es el tercer pico más alto del país.

Además, el parque ha ganado fama por sus aguas termales y cascadas, que hacen del paisaje un lugar único lleno de pequeños rincones con encanto. No solo eso, sino que hay muchas rutas de acceso para todo tipo de turistas con distintas dificultades. Todo esto ha convertido a este paisaje de montaña en una de las zonas verdes más visitadas por los coreanos.

Por su fauna y flora,a sí como sus espectaculares acantilados y valles, el Parque Nacional Seoraksan ha pasado a ser un lugar de encuentro para los coreanos. Tanto es así, que actualmente en la zona exterior del parque no es difícil encontrar hoteles y otros servicios para comodidad de sus visitantes.

Un recorrido por el Parque Nacional Seoraksan

Aunque existen varias rutas para recorrer el parque, una de las más demandadas por los amantes del senderismo es la subida de 873 metros hasta la montaña de Ulsanbawi. Sin embargo, este recorrido cuenta con una ascensión de casi 800 escalones y una pendiente de hasta un 30%, no apta para todos. Aún así, ofrece la oportunidad de cruzar senderos únicos.

Vista del templo budista

Si no queremos subir tan alto, podremos hacer varias paradas durante nuestro recorrido. Una de las más conocidas es la roca de Heundeulbawi, situada a tres kilómetros de la entrada. Aquí hay un templo budista construido en el interior de la roca. En él podremos ver algunas estatuas de Buda, por lo que son muchos los que vienen hasta aquí a orar.

Además, a tan solo 500 metros del templo encontraremos un mirador desde donde podremos observar gran parte del parque. Se encuentra más arriba y en él muchos los coreanos deciden pasar el día comiendo en compañía de amigos y familiares.

Las vistas dese la cima bien merecen la pena. Eso sí, de querer realizar el recorrido entero, conviene ir despacio y sin forzar. Ya que la bajada, aún siendo menos dura, también cuenta con tramos entre rocas y varios escalones.

Si aún nos hemos quedado con ganas de más, podremos dar un paseo en el teleférico hasta la fortaleza de Gwongeumseong. Durante el recorrido podremos contemplar más vistas y paisajes del parque. Y aunque la parada no deja a los pies, el recorrido se hace ameno. Son muchos los que recomiendan su visita al atardecer para disfrutar de las vistas.

Consejos para disfrutar de la estancia

Paisaje del Parque Nacional Seoraksan

Si finalmente hemos decidido visitar el Parque Nacional Seoraksan, la ruta más sencilla es viajar desde la capital de Corea del Sur, Seúl, utilizando el autobús. Deberemos tomar el autobús con destino Sockcho en la estación de la ciudad. El precio es bastante asequible y la duración del viaje no supera las tres horas.

Ya en Sokcho, tendremos a nuestra disposición autobuses locales que circulan cada 10 minutos para llevarnos hasta el parque. El trayecto es de unos 30 minutos. En cuanto al alojamiento, la mayoría de los visitantes recomiendan quedarse en Sokcho, ya que ofrece muchas más comodidades y servicios.

Por último, durante la visita al Parque Nacional Seoraksan conviene llevar en nuestra mochila agua y comida para realizar una subida tranquila y con todo lo necesario para reponer energías y estar hidratados. Además, como es un lugar muy visitado, podremos encontrar aseos durante el recorrido, así como cafeterías y restaurantes en la parte más alta.