Descubrimos Marrakech, una hermosa ciudad imperial

Descubrimos Marrakech, una hermosa ciudad imperial

Escrito por Virginia

Última actualización: 11 enero, 2020

Si hay una cultura que nos atrae, rica en muchos sentidos y colorida sin igual, esta sin duda es la árabe. Quizá esa atracción hacia su decoración o a muchos de sus alimentos, venga provocada por la influencia que tuvieron durante siglos. Sea como sea, lo cierto es que hay ciudades árabes hermosas que podemos visitar por poco dinero, como es el caso de Marrakech.

Marrakech es una ciudad especial situada en un punto estratégico de Marruecos y que merece la pena conocer. Y como nunca queremos dejarte sin nada interesante, vamos recorrer esta misteriosa, atractiva y majestuosa ciudad. Una opción si quieres visitar otro continente sin gastar mucho dinero, porque además de vuelos baratos, Marruecos es un país de precios bajos y buenas calidades. ¿Qué más puedes pedir?

Todo lo que no te puedes perder de Marrakech

A pesar de no ser una ciudad de museos y monumentos, Marrakech no te defraudará, pues te ofrece la oportunidad de descubrir un mundo totalmente opuesto a lo que conoces. Un mundo artesanal donde las prisas no son buenas y donde todo se frena por ofrecer as-salat, o las oraciones que están marcadas en horas específicas.

Marrakech
Marrakech – Zyankarlo

Es curioso ver como dependientes, camareros, oficinistas y otros cierran los comercios cinco minutos para arrodillarse en grupo en unas pequeñas alfombrillas (cada uno tiene la suya), y ofrecer oraciones a Al-lah.

Como dirían los marroquíes, ahlan ua sahlan (bienvenido) a conocer su ciudad.

1. Plaza de Jamaa el Fna

Este es el centro de la ciudad y el lugar más importante de esta, pues en ella se desarrolla toda la vida pública de los lugareños. Lo más interesante es ver los cambios que sufre a lo largo del día.

Plaza Jamaa el Fna en Marrakech
Plaza Jamaa el Fna – TDway

De día es todo un espectáculo en el que ver monos saltarines, encantadores de serpientes e incluso dentistas que exponen las piezas que extraen. Pero no solo personajes peculiares te esperan, sino también puestos de especias, menta, zumos y caracoles.

Sin embargo, de noche todo desaparece y aparece por arte de magia. Los tenderetes pasan a convertirse en restaurantes en los que cenar con músicos que aparecen por doquier y distintos espectáculos que te entretendrán. La comida es buena y muy muy barata, ¡atrévete a probar!

2. El zoco

Zoco de Marrakech
Zoco – Styve Reineck

Toda ciudad marroquí tiene un zoco, que en realidad es una palabra árabe para decir mercado. Sin embargo, el de Marrakech se lleva la palma. Es un entresijo de calles donde los marroquíes hacen sus compras por sus precios asequibles y donde, todo hay que decirlo, la mayoría intentan sacar el máximo de los turistas.

Podrás encontrar ropa, artesanía, comida, especias, tés, tabacos y un sinfín de productos de la zona que no podrás comprar en ningún otro lugar. Si visitas esta ciudad, no olvides que los árabes regatean y que les gusta hacerlo, así que no te cortes y saca tu mejor precio.

3. Palacio Bahía

Palacio Bahía en Marrakechc
Palacio Bahía – Shawna Tregunna / Flickr.com

Una de las obras arquitectónicas más importantes de Marrakech. A pesar de la edad de la ciudad, este palacio fue erigido a finales del siglo XIX con un único objetivo: ser el más impresionante de todos los tiempos. Es posible que quisieran hacer sombra a un palacio tan espectacular como la Alhambra. A pesar de no haber conseguido alcanzar al palacio granadino, el de la Bahía, no te decepcionará.

Tiene más de 8 hectáreas con 150 habitaciones con un abanico de patios y jardines. Aunque muchos dicen que no es espectacular, sí es el edificio más bonito de Marrakech.

4. Tumbas Saadíes

Tumbas Saadíes en Marrakech
Tumbas Saadíes – Anibal Trejo

Estas tumbas se abrieron al público en 1917 y se pueden ver en ella los restos de los sirvientes y guerreros de la dinastía saadí. La entrada cuesta más o menos un euro, un precio ínfimo que te permitirá ver un cementerio distinto al que estás acostumbrado. Creemos que merece la pena hacerlo.

5. Madrasa Ben Youssef

Una madrasa es una escuela, y esa es la palabra árabe que la define. Esta es la más grande de Marruecos, pues llegaron a estudiar hasta 900 estudiantes a la vez. Como edificio que visitar no tiene desperdicio, y su historia tampoco. Pero esta dejaremos que la conozcas cuando la visites.

“Viajar es descubrir que todo el mundo esta equivocado sobre otros países.”

– Aldous Huxley –

Marrakech es una ciudad muy peculiar que te sorprenderá y hará que no te arrepientas de haber usado tus vacaciones para conocerla. Es más, cuidado, tal vez quieras volver.