5 cosas que ver en Santillana del Mar, en Cantabria
Santillana del Mar es una de las localidades con mayor valor histórico y artístico de España. ¿La razón? Sus monumentos y que en sus inmediaciones se encuentran las cuevas de Altamira. Hay mucho que ver en Santillana del Mar, uno de los lugares más atractivos de Cantabria y uno de sus principales focos de atracción turística. ¿Tienes ganas de conocerlo? ¡Allá vamos!
Algunas curiosidades sobre Santillana del Mar
Desde el año 2013 Santillana del Mar forma parte de la red de pueblos más bonitos de España. Además, es popularmente conocida como “la villa de las tres mentiras” al no ser ni “santa”, ni “llana” ni tener “mar”.
La principal actividad a la que se dedica este municipio es el turismo. De hecho, la villa fue declarada conjunto histórico-artístico en 1889. Por algo se trata de uno de los lugares más importantes de la región, no solo por las cuevas de Altamira, también su casco histórico. Cuenta además con un jardín botánico y un zoológico y museos.
Lo que hay que ver en Santillana del Mar
A continuación te contamos algunas de las cosas que hay que ver en Santillana del Mar, aunque ya te recomendamos que camines tranquilamente por la villa y vayas descubriendo cada uno de sus rincones.
1. Las cuevas de Altamira
Las cuevas de Altamira son calificadas como “la Capilla Sixtina” del arte rupestre. En su interior hay diversas pinturas y grabados que nos llevan a pensar que se trata de pinturas realizadas en diferentes épocas. Las pinturas más famosas son los polícromos pintados en el techo, datados en el Paleolítico.
Estas cuevas fueron declaradas Patrimonio de la Humanidad en 1985. Su descubrimiento se produjo un siglo antes, en 1879, once años después de que se encontrase la cueva. Durante un tiempo se cerraron las cuevas a las visitas turísticas, por miedo a un posible deterioro de las pinturas, y hoy solo unos pocos afortunados pueden admirarlas.
Sin embargo, muy cerca se puede visitar el Museo de Altamira, donde hay una réplica exacta y donde se puede conocer casi todo de este fabuloso lugar. Por supuesto, es uno de los lugares que hay que ver en Santillana del Mar.
“Después de Altamira todo el arte parece decadente.”
-Pablo Picasso-
2. Un paseo por el casco histórico de Santillana del Mar
Prácticamente todo el municipio es casco histórico. Se organiza en torno a dos calles principales (Juan Infante y Santo Domingo). Cada una de ellas va a parar a una plaza. Las calles son adoquinadas y los edificios de piedra, datados entre los siglos XIV y XVIII. Muchos de sus bajos se han convertido en tiendas donde poder comprar productos típicos de Cantabria: anchoas, queso picón, cecina o sobaos.
La plaza de la Carrera es una de las primeras de la villa. Cuando aumentó la población en el municipio, se tuvo que construir una segunda plaza, la de Ramón Pelayo. En las calles que confluyen en ellas se construyeron caseríos de la nobleza, como la casa del Águila y la Parra, la de los Quevedo y la de Leonor de la Vega, entre otras.
Para disfrutar al máximo de este lugar, te recomendamos dar un paseo por el pueblo y hacer unas compras de productos de la gastronomía cántabra. O también probar leche con bizcocho, la merienda popular del municipio. No te arrepentirás.
3. Visita la colegiata de Santa Juliana
Es uno de los monumentos de arte románico más representativos de la región, declarado monumento nacional en 1889. Por él pasa el Camino de Santiago del norte. Se trata de una iglesia de tres naves de cuatro tramos, un cimborrio, tres ábsides y una torre.
Sus orígenes son muy antiguos, pues se habla de que la joven Juliana fue martirizada en Turquía durante el siglo III y sus restos llegaron al Reino de Asturias en el siglo IX. En su memoria, se construyó una ermita, y posteriormente se comenzaron las construcciones para convertirlo en uno de los templos más importante de Cantabria.
4. Conoce las torres del Merino y de Don Borja
Se encuentran en la plaza de Ramón Pelayo. La torre del Merino es una construcción gótica de piedra levantada durante los siglos XIII y XV. Se piensa que se construyó como residencia del merino, una especie de juez que resolvía conflictos territoriales. Actualmente la torre está restaurada y en su interior se alberga un museo.
En cuanto a la torre de Don Borja, es el actual ayuntamiento del pueblo, y un monumento declarado conjunto histórico-artístico. También es de origen medieval. De planta cuadrada, cuenta con un patio y un arco en la entrada. Al igual que la torre del Merino, ha sido restaurada y actualmente es la sede de la fundación Santillana.
5. Acércate al palacio de Velarde
También llamado palacio de las Arenas, se encuentra en una plaza del mismo nombre. Fue construido durante el siglo XVI, por lo que su arquitectura es renacentista. Se construyó para Alonso Velarde, un joven de una familia importante del municipio. Ha ido pasando de generación en generación hasta que finalmente fue vendido a un médico.
Estos son los lugares imprescindibles que hay que ver en Santillana del Mar. Una villa cargada de historia que te propone un maravilloso viaje al pasado. Sin olvidar, por supuesto, su deliciosa gastronomía.
Fotografía de portada: Jose Javier Martin Espartosa