Consejos prácticos para ir de visita a Lovaina

Probar la cerveza o subir a la torre de la biblioteca de la Universidad son dos de las cosas que hay que hacer en Lovaina.
Consejos prácticos para ir de visita a Lovaina
Armando Cerra

Escrito y verificado por el historiador del arte Armando Cerra.

Última actualización: 20 diciembre, 2018

Tal vez Lovaina no sea la ciudad más conocida por los turistas que viajan a Bélgica, pero es un lugar magnífico para hacer una excursión desde Bruselas. Allí os espera una urbe monumental y muy acogedora, gracias a la intensa vida universitaria, que aporta dinamismo a este lugar. Si vas a hacer una visita a Lovaina, esta información te interesa.

Lovaina, Louvain o Leuven

Cuando queráis ir hasta allí, tendréis opción de hacerlo con vuestro propio coche (o alquilado) por carretera, en autobús o, lo mejor de todo, en tren. Además de que queda muy cerca del propio aeropuerto de Bruselas.

Dado el bilingüismo imperante en Bélgica, donde conviven el francés y el flamenco, su nombre lo encontraréis en la señalización y carteles de dos formas: Louvain y Leuven. Pero una vez que tenemos claro nuestro destino, os aconsejamos sobre los lugares y actividades que no pueden faltar en vuestra visita a Lovaina.

Visita al Stadhuis

Ayuntameito de Lovaina
Ayuntmaiento de Lovaina – J. A. Alcaide / Flickr.com

El Stadhuis o ayuntamiento de Lovaina es una visita obligada. Es una de las joyas de la arquitectura belga con un estilo propio: el gótico brabantino. Podéis pasar un buen rato admirando y fotografiando su fachada con innumerables esculturas de personajes históricos.

Y tras ver el exterior, es posible hacer una visita guiada por su interior. Además de que deberéis de entrar porque allí está la principal oficina de turismo de la ciudad. En ella os podéis informar sobre tarjetas turísticas o actividades, porque la verdad es que en Lovaina siempre hay cosas que ver y hacer.

Tómate una cerveza, imprescindible en la visita a Lovaina

Fábrica de cerveza en Lovaina
Fábrica de cerveza

Lovaina es una de las capitales cerveceras del mundo. Aquí se elaboran distintas marcas y, sobre todo, destaca al archifamosa Stella Artois, cuya visita a la fábrica os recomendamos.

Pero hay diferentes cervecerías artesanales más modernas repartidas por las calles de la ciudad. En ellas os podrán servir sus mejores productos en las condiciones idóneas para su degustación.

No obstante, hay otro sitio en el que tomarse una cerveza es obligado: la Oude Markt. Una larga plaza repleta de bares y terrazas que con el buen tiempo se convierte en el punto neurálgico de la diversión en la ciudad.

Disfrutar de las vistas panorámicas de Lovaina

Biblioteca de la Universidad de Lovaina
Biblioteca de la Universidad – Beth / Flickr.com

Esta ciudad es la principal universidad belga y hay muchos edificios relacionados con esa institución. No te pierdas la espectacular la Biblioteca Universitaria. Por cierto, bajo su apariencia de edificio renacentista, la verdad es que fue reconstruido tras la Primera Guerra Mundial con dinero de Estados Unidos.

Por ello, al entrar se ve la presencia del país americano en varios puntos. Fijaros en ello, pero, sobre todo, no dudéis en subir a la torre. Imprescindible porque desde ella se obtienen la mejores vistas del monumental centro de la ciudad.

Desde la torre verás el cercano ayuntamiento o la bella iglesia de San Pedro, en la misma plaza. También podrás distinguir los múltiples colegios universitarios históricos que te esperan en tu visita a Lovaina.

Entra al M-Museum

M-Museum en una visita a Lovaina
M-Museum – Lux & Jourik / Flickr.com

Muy cerca de la biblioteca de la Universidad se encuentra otro de esos lugares que os aconsejamos visitar, más aún si tenéis el infortunio de que haga un mal día en la ciudad. Y es que hay que tener en cuenta que es muy posible que llueva. Si es así, no hay mayor problema, ya que podréis pasar un buen rato en el M-Museum.

Ya su fachada nos anticipa lo que nos espera dentro, ya que se trata de un inmueble que fusiona los elementos clásicos con otros mucho más modernos. Y eso mismo ocurre en sus salas de exposiciones porque durante el recorrido veremos tanto arte histórico como contemporáneo.

Pasea por una joya que es Patrimonio de la Humanidad

Beaterio de Lovaina
Beaterio de Lovaina

La visita a Lovaina no está completa sin darse un paseo por el Begijnhof. Es el Beaterío, un lugar por el que ahora cualquiera puede pasear, pero no era así en otro tiempo.

En realidad, era como una ciudad dentro de la ciudad, pero exclusivamente para mujeres. Eran las beguinas, que hacían votos de castidad y se refugiaban en estas viviendas que ahora nos parecen salidas de un cuento. Descubrir este sitio nos dará que pensar sobre la vida en otros tiempos.

Y, si se quiere reflexionar sobre ello, o charlar del tema con los compañeros de viaje, nada como buscar una buena cervecería cercana y tomar una cerveza local. En Lovaina nunca está de más beberse otra cerveza. Disfruta del sabor de una ciudad muy interesante.