El castillo de Villandry y sus fabulosos jardines

La gran joya del castillo de Villandry son sus espectaculares jardines. Representan todo un derroche de imaginación, dominio del paisajismo y amor a la naturaleza.
El castillo de Villandry y sus fabulosos jardines
Armando Cerra

Escrito y verificado por el historiador del arte Armando Cerra.

Última actualización: 28 enero, 2021

El castillo de Villandry es una de las citas obligadas en cualquier recorrido por el valle del Loira. Se trata de un lugar que aúna la mejor arquitectura del Renacimiento en Francia y unos jardines increíbles en los alrededores de la construcción.

Hablamos de un sitio que durante la visita no para de provocar adjetivos a todo aquel que lo descubre. Si bien, hay uno que se resume todas las sensaciones que nos transmite: el castillo de Villandry es exquisito.

Dónde está el castillo de Villandry

Castillo de Villandry

Para visitar el castillo de Villandry y sus maravillosos jardines, como ocurre con la gran mayoría de paradas imprescindibles en la ruta de los castillos del Loira, hay que tomar como referencia la mayor ciudad de esta área de Francia: la histórica urbe de Tours. Desde ahí, en apenas 20 o 25 minutos de carretera llegamos hasta este castillo, situado al sudoeste de la ciudad.

Sin duda, lo más famoso del castillo de Villandry son sus increíbles jardines. Pero también merece la pena mencionar la propia obra arquitectónica de esta residencia palaciega. Es una construcción renacentista que diseñó y construyó en 1536 Jean le Breton. Este, además de su arquitecto, fue el propietario.

Quizás su nombre no os diga nada, pero es bueno conocerlo porque también fue el constructor de una de las joyas que también podéis visitar durante vuestro periplo por el valle del Loira: el castillo de Chambord.

Jardines de Villandry: espectaculares todo el año

Jardín del castillo

En el pasado, los castillos, o más bien los palacios de toda Europa, no estaban concluidos hasta que no se habían terminado los jardines que los rodeaban. Se podían llamar castillos, pero, más que fortalezas, eran residencias señoriales con todos los lujos de la aristocracia, y entre ellos se incluían los amplios jardines.

Es algo que ocurría en Francia, pero también en Inglaterra con lugares tan fantásticos como el palacio de Kesington de Londres, los famosos jardines del palacio de Aranjuez en España o el enorme ajardinamiento del Palacio Real de Caserta en Italia. Y esto es solo por nombrar unos pocos ejemplos, podríamos citar muchísimos más.

Sin embargo, hoy nos tenemos que detener en el castillo de Villandry. Su auténtica joya son sus jardines renacentistas, cambiantes con cada estación del año. Por ello, por muchas veces que se visiten, su aspecto siempre es diferente.

Zonas de los jardines del castillo de Villandry

Jardines del castillo

Cuando se diseñaron los jardines del castillo de Villandry se crearon distintos espacios, cada uno de ellos capaz de provocar diferentes sensaciones. Básicamente, son seis las zonas por las que pasear. Una es el Jardín del Amor, cuyos parterres con flores de variados colores evocan distintos tipos de romances o de estados amorosos, desde el más apasionado hasta el amor trágico.

Otra área es el Jardín de la Música, donde dominan los bojs, tejos y combinaciones de flores que forman bordados vivientes. También está el Huerto de los Simples, donde crecen plantas aromáticas y medicinales. Un poco más allá está el Potager, un huerto repleto de verduras y hortalizas. Y se puede caminar por el Jardín de Agua y el Jardín del Sol atravesando sus airosos arcos vegetales.

En definitiva, que la caminata por los jardines del Villandry es todo un deleite para los sentidos y para la imaginación porque cada área nos va transmitiendo distintos pensamientos y sensaciones.

Propiedad de un español

Castillo de Villandry

El castillo de Villandry ha pasado a lo largo de la historia por diversos propietarios, y cada uno ha dejado su impronta en el lugar. Pero tenemos que mencionar al español Joaquín Carvallo y su esposa estadounidense Anne Coleman, que compraron el lugar en 1906. Esa compra salvó a Villandry de un estado ruinoso y emprendieron una costosa y lenta restauración.

Gracias a eso, hoy en día el castillo de Villandry es una de las grandes joyas de la ruta por el Loira. Su fama está a la altura de los grandes chateaux de esta región francesa, como pueden ser los castillos de Chenonceau, Amboise o Sully sur Loire. ¡Todos ellos considerados Patrimonio de la Humanidad por la Unesco!