5 iglesias y capillas de San Petersburgo que debes visitar
Rusia está de moda. Por eso, te invitamos a un viaje por las mejores capillas de San Petersburgo, templos que debes visitar si te encuentras en esta preciosa ciudad. Sin duda, esta es una de las urbes más especiales de un país que combina dos continentes, Asia y Europa.
Iglesias, catedrales y capillas de San Petersburgo que debes conocer
Veamos los más espectaculares templos y capillas de San Petersburgo, una pequeña parte del espectacular patrimonio de esta ciudad. Algunas son iglesias que tal vez te suenen, de otras quizá no hayas oído hablar nunca, pero todas son maravillosas.
1. Iglesia del Salvador sobre la Sangre Derramada
También se le llama la iglesia de la Resurrección de Cristo. Es de las capillas de San Petersburgo más famosas de la ciudad. Destacan la composición pictórica de su interior y decoración multicolor de sus cúpulas en el exterior. Todo ello hace que sea un punto destacado de la arquitectura del centro de la ciudad.
Se sitúa cerca de la Avenida Nevski, en la orilla de uno de los canales, el Griboyédova, que se llama así en honor al famoso dramaturgo, poeta, música, y diplomático ruso Aleksandr Griboyédov. La iglesia de construyó en el lugar donde asesinaron al zar Alejandro II de Rusia.
En la Segunda Guerra Mundial una bomba cayó encima de la cúpula más alta, pero no llegó a explotar. Allí permaneció durante años, hasta que unos obreros que estaban reparando la cúpula la encontraron. Una vez retirada, se empezó la restauración de la iglesia, que después se inauguró como museo de carácter estatal.
2. Catedral de San Isaac
La catedral de San Isaac podría decirse que es la más suntuosa y grandiosa de las iglesias de la ciudad. A la hora de decorarse, se usaron más de 40 minerales diferentes.
Para dar una idea de las cifras, la cúpula tiene 21,8 metros de diámetro y se llegaron a emplear 100 kilos de oro para recubrirla. Además, cuatrocientas obras de arte entre esculturas, mosaicos y pinturas adornan este templo.
Desde 1931 la catedral es un museo. Como curiosidad, durante la Segunda Guerra Mundial, se pintó de gris para evitar que pudiera atraer a los aviones enemigos.
3. Catedral de San Pedro y San Pablo
Se encuentra en la fortaleza de San Pedro y San Pablo, la ciudadela original de San Petersurgo. La diseñó el arquitecto suizo Domenico Trezzini y fue erigida en 1703. Destaca su espectacular aguja, que alcanza los 123 metros de altura y está coronada por la figura de un ángel.
En esta iglesia están enterrados los zares, desde Pedro I el Grande hasta Nicolás II y su familia. En 1924 gran parte de la fortaleza en la que se encuentra se transformó en museo.
4. Catedral de Nuestra Señora de Kazán
Esta catedral es la más importante a nivel oficial. Además, es la sede del obispo ortodoxo de San Petersburgo. Se consagra a la Virgen de Kazán, que es el icono de mayor veneración de Rusia.
En su momento se percibió como un monumento a las victorias militares de Rusia en la guerra emprendida contra Napoleón. En la misma catedral está enterrado el mariscal de campo Mijail Kutúzov. Hablamos de una de las cumbres en la arquitectura neoclásica rusa.
Después de la Revolución de 1917 se cerró y en 1932 volvió a abrirse como Museo de la Historia de la Religión y el Ateísmo. En 1996 la catedral fue devuelta a la Iglesia Ortodoxa Rusa.
5. Catedral Naval de Kronstadt
Queremos terminar hablando sobre ella. Se encuentra en la ciudad portuaria que está en la isla de Kotlin, a unos 30 kilómetros al oeste de la ciudad, pero dependiendo de ella administrativamente.
Esta es la catedral ortodoxa más nueva. Se levantó entre 1903 y 1913 como templo principal en la Flota del Báltico y dedicada a todos los marinos caídos. Realizada en estilo neobizantino, es de proporciones descomunales, con una cúpula que alcanza 27 metros de diámetro.
Después de la Revolución de 1917 la iglesia se cerró al culto, pasando a ser cine, club para oficiales del ejército e incluso el Museo de la Marina en 1980.
Como ves, San Petersburgo está repleta de iglesias y catedrales que merece la pena conocer. Una ciudad encantadora donde el arte y la religión están muy presentes.