Visita el cabo de la Vela, un lugar mágico
¿Sabías que en el mar Caribe se esconde el cabo de la Vela? Se trata de un lugar único, alejado de la civilización, pero con una gran historia oculta en cada centímetro de arena. Actualmente, es un punto turístico importante, y en él puedes disfrutar de diferentes actividades. ¿Te gustaría visitar con nosotros el cabo de la Vela? ¡Sigue leyendo!
Cabo de la Vela, historia convertida en turismo
En 1499, el navegante español Alonso de Ojeda desembarcaba en el cabo de la Vela durante una de las expediciones castellanas al Nuevo Mundo. Era el comienzo de una gran etapa: la expansión y colonización de las Américas. Y empezaba en tierra de uno de los lugares más bonitos y desconocidos del Caribe.
Antes de la llegada de los marineros, el cabo de la Vela era el hogar del pueblo indígena Wayùu. En concreto, era un lugar místico, donde dejaban a sus difuntos para que pudiesen partir hacia “lo desconocido”.
Un lugar tranquilo, mágico y especial. Un punto de encuentro con el propio hombre, gracias a la tranquilidad de sus aguas turquesa, que se funden con el cielo azul, y sus arenas doradas.
Si lo comparamos con el ambiente, la fiesta y los colores de otros lugares del Caribe, el cabo de la Vela es un lugar mucho más tranquilo, con playas y experiencias diferentes para todo aquel que se decida a visitarlo.
¿Cómo disfrutar de tu estancia en el cabo de la Vela?
Desde su descubrimiento, por el cabo de la Vela han pasado navegantes de todo el continente europeo. Hasta hace años, apenas nadie se acercaba hasta este precioso lugar.
No obstante, poco a poco ha ido descubriéndose, y en los alrededores del cabo se han montado posadas y restaurantes para ofrecer servicios a los turistas. ¿Te gustaría saber cómo disfrutar de este lugar?
Una estancia en una cabaña
A diferencia de los hoteles de lujo o de los todo incluido que te esperan en el Caribe, en el cabo de la Vela las opciones de alojamiento son completamente distintas. Ya te hemos dicho que durante años ha sido un lugar sagrado, por lo que se ha luchado por respetar su naturaleza todo lo posible. Y lo han conseguido.
Si te gustaría vivir una estancia inolvidable en el cabo de la Vela, tienes la opción de hacerlo… ¡En una cabaña de madera! No te mentimos. A lo largo de la playa se han dispuesto cabañas con hamacas para prestar servicio de alojamiento a los turistas que lo demanden.
Reciben el nombre de posadas, y tenemos más que claro que es difícil encontrar otro lugar así en el mundo. Aparte de estos “albergues a pie de playa” también hay algunos hostales y opciones de alojamiento.
Oportunidad de oro para disfrutar de los mejores platos caribeños
Otra de las cosas únicas que podrás vivir en el cabo de la Vela es probar sus platos en los pequeños restaurantes dispuestos cerca de la playa. La comida en esta zona se basa en arroz y en pescados fritos, pero al más puro estilo caribeño.
Todos ellos han sido elaborados con el cariño de las personas que habitan el cabo de la Vela, y que se dedican a ofrecer en la medida de lo posible los servicios más confortables a los visitantes.
¿Qué más puedes hacer en el cabo de la Vela?
Además de poder dormir en una cabañita de madera y comer pescado frito, hay muchas cosas que hacer en el cabo de la Vela. Además de disfrutar de sus aguas caribeñas y de un paseo por la arena, hay otros lugares que descubrir.
Por ejemplo, puedes visitar el Pilón de Azúcar, la zona del cabo propiamente dicha. Es el lugar sagrado para el poblado indígena y cuenta con una pequeña playa. Desde ahí tienes unas vistas increíbles del mar y su arena dorada.
Junto a todo esto, podrás practicar deportes acuáticos, ver un precioso atardecer desde el faro y enamorarte por completo de sus playas. ¡Estamos seguros de que no te arrepentirás!
Ya lo has visto, el cabo de la Vela te ofrece la oportunidad de vivir experiencias únicas sin necesidad de viajar hasta otros lugares del Caribe. Si te gustan las playas tranquilas y te gustaría visitar el paraíso, ya sabes hacia dónde dirigirte. ¿Te gustaría conocerlo? ¡Prepárate para un viaje inolvidable a Colombia!