8 preciosos pueblos de la alta montaña argentina
Entre valles y bosques, estos pueblos de alta montaña argentina te sorprenderán. Son realmente preciosos y seguro que querrías quedarte a vivir en cualquiera de ellos. Más o menos poblados, pero con toda la tranquilidad que se pueda esperar, te recomendamos los siguientes destinos del país sudamericano.
Pueblos y ciudades de alta montaña argentina
Argentina tiene todos los paisajes que podamos imaginar, desde mares a desiertos, pasando por selvas y sierras. Y por supuesto, nos ofrece la alta montaña, con sus inviernos nevados y sus veranos coloridos. Estos son los más bonitos destinos montañosos que podemos encontrar en el país:
1. San Martín de los Andes
Está ubicado al sudoeste de la provincia de Neuquén y es un paraíso entre volcanes y bosques. A orillas el lago Lácar, esta ciudad nació y se desarrolló como destino turístico en plena Patagonia.
Sus paisajes naturales son realmente impresionantes, con nieves eternas en los picos de las montañas, un parque nacional a pocos kilómetros y el imponente volcán Lanín en las cercanías.
2. Caviahue
Esta localidad está “anexionada” al centro termal Copahue, un centro que recibe miles de turistas entre noviembre y abril por las propiedades medicinales de las aguas geotermales minerales.
A partir de mayo es imposible acceder por la nieve que se acumula, y es que Caviahue se ubica a 1600 metros sobre el nivel del mar, entre un volcán y un lago.
3. El Chaltén
Este pequeño pueblo de alta montaña argentina (localizado en la provincia de Santa Cruz) es uno de los más jóvenes del país. Desde su centro de pocas calles parten senderos hacia lo más auténtico de la naturaleza.
Esos caminos, que parecen sacados de un cuento, nos permiten disfrutar del trekking y llegar a lugares emblemáticos de la Patagonia. En tu recorrido por los alrededores de El Chaltén encontrarás desde torres de roca gigantes a lagos de color turquesa, pasando por glaciares enormes y zonas indómitas.
4. Villa Pehuenia
Es una joya patagónica todavía no masificada por el turismo. Por lo tanto, si te gusta la tranquilidad, te recomendamos este pueblo del sector andino de la provincia de Neuquén, a orillas del lago Aluminé.
Las montañas más altas presentan picos nevados todo el año, también encontrarás lagos glaciares como el Moquehue y hermosos bosques de coníferas. En invierno se practican deportes de nieve en el Cerro Batea Mahuida y en verano se puede disfrutar de senderismo, campamento y actividades al aire libre.
5. Purmamarca
Nos alejamos un poco de la Patagonia para llegar a otro de los pueblos más bonitos de la alta montaña argentina, protegido por cerros de colores que parecen haber sido pintados por un artista.
Purmamarca tiene casas bajas hechas de adobe, el cielo allí siempre es de un azul intenso y si miras a tu alrededor te encontrarás con los típicos cardones (una especie de planta con agujas espinosas) y el río Purmamarca a tus pies.
“La naturaleza siempre lleva los colores del espíritu.”
-Ralph Waldo Emerson-
6. Lago Puelo
El pueblo se llama igual que el lago cercano, en plena Patagonia andina, al noroeste de la provincia de Chubut. El paisaje, la tranquilidad y la exuberante belleza natural son sus principales características.
Lago Puelo vive casi exclusivamente del turismo. De pequeñas dimensiones, está rodeado por bosques con varios senderos para explorar.
7. Villa La Angostura
Otro de los pueblos de alta montaña argentina que no te puedes perder si estás paseando por la Patagonia. La famosa “Ruta de los Siete Lagos” desemboca en esta ciudad de la provincia de Neuquén, en el entorno del Parque Nacional Nahuel Huapi.
Villa La Angostura se puede disfrutar tanto en invierno como en verano, porque se mimetiza con el bosque (nevado o florecido según la estación).
8. La Cumbrecita
Este singular pueblo se encuentra en el centro del país, en la provincia de Córdoba, y parece sacado de un cuento alemán. La Cumbrecita se localiza a más de 1500 metros sobre el nivel del mar y su arquitectura está formada por casas de entramado de madera.
En los alrededores los bosques de pinos y coníferas también te harán pensar que te encuentras en tierras germanas. Un lugar perfecto para disfrutar de la naturaleza.
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