5 miedos que acechan a los viajeros y cómo conjurarlos
Siempre hay miedos que acechan a los viajeros. Es algo perfectamente normal, especialmente cuando vas a un destino muy lejano o que es muy distinto a lo que te resulta familiar. Y, si tienes poca experiencia viajando, es lógico que te asalten muchos temores.
Los miedos que acechan a los viajeros no siempre son específicos o precisos. Estos, a veces, se experimentan como un temor global. Se acerca la fecha de tu viaje y te sientes asustado, pero no logras definir exactamente por qué o a qué temes.
En realidad, todo se puede resumir diciendo que los seres humanos tememos a lo desconocido y a lo incierto. Ese temor no es negativo por sí mismo. De hecho, el miedo es también una fuerza que te ayuda a ser más precavido o cauteloso, evitando peligros innecesarios.
Sin embargo, sentir temor también es algo molesto. Cuando permitimos que crezca demasiado, nos limita significativamente. ¿Cuáles son esos miedos que acechan a los viajeros? ¿De qué manera podemos librarnos de ellos? Veamos.
1. Miedo a quedarte sin dispositivos
En el mundo actual, nos hemos vuelto muy dependientes de los dispositivos tecnológicos. A través de ellos organizamos muchas cosas y, de alguna manera, ‘manejamos el mundo’. El móvil, la tablet o el ordenador son el eje de muchas actividades. También son el recurso al que acudimos cuando tenemos una duda o un problema.
Uno de los mayores miedos que acechan a los viajeros es el de quedarse sin conexión o sin dispositivos. Esto equivale a quedarse incomunicados y asusta. Pero siempre hay alternativas.
Quizás no necesitamos tanto de esos dispositivos y podemos acudir a un locutorio para lo básico. También es posible alquilar esos aparatos en muchas partes. O es posible que descubras que no necesitas estar conectado a todas horas. Es un problema que, en todo caso, tiene solución.
2. Enfermar, uno de los miedos que acechan a los viajeros
Nadie quiere enfermar cuando viaja, y mucho menos si viaja solo. Para impedir que esto ocurra, sigue algunas recomendaciones. El agua es un factor problemático. Si no estás seguro de su potabilidad, toma refrescos envasados. Tampoco comas verduras crudas en un lugar que no conoces.
No olvides ponerte las vacunas recomendadas para cada destino y llevar un buen repelente, si vas a zonas en donde hay muchos insectos. Mantén una buena higiene, lleva un gel antibacteriano a todas partes y lávate las manos con frecuencia. Por supuesto, contrata siempre un seguro de viaje.
3. Sentir rechazo o soledad
Este es uno de los miedos que acechan a los viajeros solitarios o que van con personas que no son de su entera confianza. Parte de la idea de que las relaciones humanas no son perfectas. Siempre habrá tensiones y contradicciones en ellas. Sin embargo, una buena actitud ayuda mucho a que todo fluya.
Cuando hablamos de buena actitud, nos referimos a estar abierto a los demás, ser cortés y flexible. Recuerda que una sonrisa siempre es muy poderosa. Si confías en los demás y los respetas, seguramente también confiarán en ti y te respetarán. Aléjate de las personas problemáticas y agresivas.
4. Miedos que acechan a los viajeros: quedarse sin dinero
Hay personas que andan por el mundo sin un euro en el bolsillo y no se angustian. Siempre encuentran la manera de salir adelante. Pero hay personas que dependen del dinero para llevar a cabo sus planes de viaje y, en ese caso, quedarse sin dinero es calamitoso.
Lo mejor es que pagues por adelantado todo lo que puedas. De esta manera, no tendrás que llevar mucho dinero y tendrás asegurado lo básico en los sitios a donde vayas. Guarda el dinero y las tarjetas en diferentes sitios. Deja siempre un billete grande en un sitio secreto o muy íntimo. En ciertos casos, podría salvarte.
5. Los sucesos imprevistos
La mejor manera de conjurar esos miedos es planificando todo con el mayor detalle. Sin embargo, a pesar de que tengas todo muy bien planeado, nunca se puede descartar que se presenten sucesos imprevistos. Lo sabes, y eso te asusta.
Esta es una norma básica para que aprendas a manejar ese miedo: confía en ti. Ante cualquier situación imprevista, toma un minuto para respirar. No permitas que el miedo se apodere de ti ni tomes decisiones antes de estar suficientemente sereno.
Examina tus opciones, pregunta a quienes estén a tu alrededor y trata de encontrar la mejor solución. No te presiones. Recuerda que la primera condición para tomar buenas decisiones es estar lo más calmado posible. Confía en que saldrás adelante.
- Atención al viajero. Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social. Recuperado de: https://www.mscbs.gob.es/ciudadanos/proteccionSalud/vacunaciones/viajero/home.htm