Transilvania: cuatro leyendas que no conocías
Transilvania siempre ha estado rodeada de leyendas desde que Bram Stoker la hizo famosa con su novela Drácula. Son muchos los que se acercan a ver el tenebroso castillo del vampiro, aunque la verdad que esta es una región fascinante, con mucho por descubrir y algunas historias que queremos contarte.
Otras leyendas en Transilvania
Si eres de los que disfruta escuchando viejas historias y leyendas de todo tipo, prepárate, este es un viaje que no olvidarás fácilmente.
Secuestro de niños
El flautista de Hamelín es una historia conocida por todos. Un flautista que logra acabar con una plaga de ratas, pero la aldea se niega a pagarle la recompensa que le había prometido. Es entonces cuando seduce a los niños con sus melodías y se los lleva como venganza.
El final de la historia tiene varias versiones, una de ellas dice que los niños aparecieron en la cueva de Vaghis, en Transilvania, y que ya se quedaron allí para siempre. Esta es la leyenda, la realidad es que durante la Edad Media a estas tierras llegaron muchos colonos procedentes de Alemania.
“Las leyendas crean a veces la realidad, y resultan más útiles que los hechos.”
-Salman Rushdie-
La leyenda del castillo Hunyad
Este es un impresionante castillo del siglo XIV que tiene una torre llamada Nje Bojsia, que traducido significa “no tengas miedo”. Pero algo de miedo sí se siente al escuchar la terrible historia que encierran sus paredes.
Dice la leyenda que varios presos turcos cavaron durante años para hacer el pozo que hay en la entrada. La promesa era que cuando encontraran agua quedarían en libertad. Pero el entonces señor del castillo, Lancu de Hundoara murió antes de que acabaran.
Su esposa, en lugar de liberar a los prisioneros, ordenó decapitarlos. Antes de ser ajusticiados hicieron una inscripción que aún se puede leer y que dice “Ahora tenéis agua, pero no tenéis corazón”.
Otra de las leyendas del castillo cuenta que aquí estuvo preso Vlad el Empalador, el terrible personaje que inspiró a Bram Stoker para crear al vampiro más famoso de la historia.
La caída del niño misterioso
En la parte superior de uno de los pilares de la Iglesia Negra de Brasov se puede ver la estatua de un niño que parece a punto de caerse. La leyenda dice que los constructores de la iglesia empujaron a un pequeño para comprobar que el muro era recto. Como homenaje y recuerdo se realizó esa peculiar estatua que adorna la iglesia.
Otra leyenda dice que un aprendiz hizo sentir celoso a su amo durante la construcción y este, como venganza, lo empujó. Más tarde, preso de los remordimientos, confesó lo ocurrido. Los demás constructores decidieron hacer entonces una estatua para que el joven no fuera olvidado.
El puente de los mentirosos
El llamado puente de las mentiras de Sibiu es un lugar hermoso en el que sacar preciosas fotografías siempre y cuando digas la verdad… Según la leyenda, el puente tiene la capacidad de bloquearse y hacer ruidos extraños cada vez que alguien miente.
Hay historias que aseguran que los comerciantes que engañaban a sus clientes eran arrojados por él. También se arrojaba a niñas que mentían sobre su pureza antes del matrimonio. Y se conoció como símbolo de la mentira por ser el lugar en el que los cadetes que estaban de paso prometían la luna y las estrellas a chicas antes de irse a su misión y olvidar sus nombres.
Como ves, Transilvania está llena de leyendas en lugares hermosos que merece la pena conocer. ¿Has tomado buena nota para tu próximo viaje? Pues aún tenemos más.
Qué más ver en Transilvania
Transilvania es más que leyendas, la región tiene lugares otros increíbles por descubrir, además de los que te citamos arriba.
- Transfagarasan Road, conocida como la carretera infernal. Atraviesa los Cárpatos con un trazado que hace honor a su sobrenombre. Curvas y más curvas, pero con unos paisajes naturales impresionantes que no te puedes perder.
- Sibiu. Una ciudad llena de paredes desconchadas y ventanas con formas de ojos que te harán tener escalofríos.
- Sighiosara. Una ciudad hermosa de calles empinadas y casas coloridas, rodeada de un manto verde que embaucará tus sentidos. Es Patrimonio de la Humanidad, cuando estés allí no te costará saber por qué.
¿Has disfrutado de nuestro paseo por este bello país? Pues atrévete a descubrirlo por ti mismo.