Sumérgete en el arte y la cultura de Dubái

Descubrir la cultura de Dubái es motivo para hacer un viaje a los Emiratos Árabes. Una mezcla de hospitalidad, tradiciones, modernidad y ostentación.

Escrito y verificado por el historiador del arte Armando Cerra.

Última actualización: 12 enero, 2020

El arte y la cultura de Dubái están íntimamente ligados a dos factores de esta sociedad: la religión islámica y su enorme potencial económico. Tanto las manifestaciones culturales más antiguas como las que se desarrollan hoy son incomprensibles sin ambos elementos. Algo que, por otra parte, es aplicable a casi cualquier cosa que viváis en un viaje a Dubái. Ahora vamos a hacer uno virtual, ¿nos seguís?

Tradición y modernidad

El impacto que nos provoca la cultura de Dubái es supremo. Puede ser más mareante incluso que el jet lag que provocan las varias horas de vuelo hasta llegar allí. Además, ese choque cultural nos llega en dos direcciones.

Por un lado, vemos la ciudad de Dubái más tradicional, la que se visualiza en sus mezquitas y en sus vibrantes zocos. Y esto es de lo más chocante cuando descubrimos lo más actual y ostentoso, como son sus centros comerciales o la torre más alta del mundo, el Burj Kahlifa.

Todo ello, por no hablar de sus hoteles excepcionales, como el Burj al Arab. Allí uno siente una de las manifestaciones más emblemáticas de la cultura de Dubái: la inmensa y exquisita hospitalidad del pueblo árabe. Algo que, por otra parte, los turistas notarán en cualquier otra de las visitas que van a hacer por la ciudad.

La cultura de Dubái más tradicional

Sin duda alguna, la imagen que proyectan los Emiratos en la actualidad es la de un territorio cargado de contemporaneidad, casi futurista. Pero, para descubrir el arte y la cultura de Dubái hay que hacer una inmersión por sus zonas históricas.

Por ejemplo, allí nos espera el barrio de Bastakiya. Es en este lugar donde todavía se guardan algunas de las viejas construcciones de antiguos comerciantes.

Si bien, ninguna de ellas es tan antigua como la fortaleza de Al Fahidi, la edificación con más historia de Dubái. Su interior alberga un museo que, sin duda alguna, es el lugar idóneo para conocer lo más destacado del arte y la cultura de Dubái.

Eso, junto a los zocos del oro y el de las especias, además de algunas mezquitas históricas a las que solo pueden entrar los musulmanes, son las mejores expresiones de las esencias culturales de esta ciudad. Una ciudad que por momentos es desconcertante, aunque siempre se muestra muy acogedora con sus visitantes.

La cultura de Dubái en la actualidad

La otra cara de la moneda son los nuevos espacios que han surgido al amparo de la ingente riqueza que han proporcionado a las clases altas los yacimientos de gas y petróleo. Para ellos el dinero no supone problema alguno y por eso han entrado en una espiral de gasto en la que se busca la ostentación más absoluta.

Nada es aquí modesto. Si hay que construir una isla artificial para alojar turistas en lujosos apartamentos, entonces se hace la impresionante Palmera Jumeirah, cuya visión desde el cielo es impactante. Si se quiere levantar un centro comercial, pues que tenga las mayores fuentes del mundo, como es el Dubai Mall. Y así con todo.

Además, se promueven todo tipo de eventos que hacen que la cultura de Dubái se relacione con la de todo el mundo. Casos como la feria Art Dubai es una buena muestra. O el novedoso edificio de la Ópera, diseñado por el arquitecto danés Janus Rostock con la forma de uno de los barcos típicos que navegan por el golfo Pérsico.

Un viaje tan distinto, que ni lo imaginas

En definitiva, hacer un viaje a los Emiratos Árabes e intentar hacer una inmersión en la cultura de Dubái es una experiencia de lo más enriquecedora. Como decíamos al principio, es una vivencia chocante, pero, desde luego, inolvidable.

Esa extraña fusión entre la religión islámica y lo más occidental, entre lo ancestral y lo más rabiosamente vanguardista, es lo que configura el actual Dubái, con todo su lujo y sus muchas contradicciones. ¡Un destino diferente y sobre el que cada viajero tiene una opinión de lo más personal a su vuelta!