Qué ver en el monasterio cisterciense de Poblet

El monasterio de Poblet es una de las grandes joyas cistercienses que se conservan en Europa. Un magnífico recinto que vamos a recorrer.
Qué ver en el monasterio cisterciense de Poblet

Última actualización: 23 abril, 2018

Vamos a visitar uno de los monasterios más emblemáticos de Cataluña: el monasterio de Poblet. Se trata de una de las más grandes y bellas abadías cistercienses de Europa. Por ello, fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en el año 1991.

El monasterio se encuentra en el término municipal de Vimbodí i Poblet, en la provincia de Tarragona. Un lugar tranquilo, perfecto para unas vacaciones libres de estrés. Por ello, por su historia y la belleza de su enclave, cada año infinidad de turistas se deciden a pasar unos días en este lugar.

El monasterio de Poblet

Monasterio de Poblet
Monasterio de Poblet – Vitaly Titov

El monasterio se construyó en la Edad Media y, con el tiempo, llegó a convertirse en uno de los focos espirituales más importantes de la región. Pero el de Poblet era mucho más que un monasterio.

A finales del siglo XII, el monasterio llegó poseer 17 granjas, cada una gobernada por un monje. Dentro del recinto había una verdadera población: tenía enfermería, farmacia, molinos, panaderías, cementerios, jardines, etc.

Desde su fundación, el monasterio de Poblet estuvo bajo la protección y el patronazgo de los reyes de Aragón, que incluso situaron en este lugar el panteón real. También tuvo una estrecha relación con las grandes casas nobiliarias de Cataluña.

Sin embargo, después de siglos de esplendor, tuvo que cerrarse en el siglo XIX, tras la desamortización de Mendizábal. Pero ya algunos años antes la situación política, las guerras y otras circunstancias habían hecho que fuera decayendo poco a poco. Más adelante, a mediados del siglo XX, se volvió a habitar el monasterio y hoy es hogar de 30 monjes.

En el año 1991 fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Es un gran logro, puesto que lo convierte en uno de los cinco monasterios españoles con este reconocimiento. Los otros cuatro son los monasterios de Guadalupe, El Escorial, San Millán de Yuso y San Millán de Suso.

Qué ver en el monasterio de Poblet

Claustro monasterio de Poblet
Claustro – Mario Martí / Flickr.com

Desde la distancia, el imponente conjunto parece una fortaleza. Una serie de  murallas protege los edificios y rodea el monasterio. En total, tiene más de 600 metros de muralla defendida por 12 torreones. Encontrarás varias puertas, pero no puedes olvidarte de admirar la Puerta Real, propia de una verdadera fortaleza.

Dentro encontrarás, entre otras edificaciones, el palacio del rey Martín I el Humano. Es de estilo gótico y en su interior se encuentra un pequeño museo de arte litúrgico. Martín I fue el último monarca de la Corona catalano-aragonesa y en las paredes de su palacio se puede admirar el blasón real.

Después, el monumental claustro te fascinará. Es una muestra de la mezcla de estilos: algunas galerías son góticas, otras románicas, etc. Tampoco te puedes perder el lavabo o lavatorio, de estilo gótico y que data del siglo XIV.

Dos tesoros dentro del monasterio

Iglesia del Monasterio de Poblet
Iglesia del monasterio – Inu / Shutterstock.com

Es imprescindible recorrer despacio la iglesia del monasterio. Una iglesia de planta basilical y tres naves. En ella destaca un bellísimo retablo en alabastro, una obra de Damiá Forment realizada entre 1527 y 1529.

La otra gran joya son los panteones reales, en los que reposan algunos de los monarcas de la Corona de Aragón. En el recinto, tanto dentro de la iglesia como en el claustro y el exterior hay otros enterramientos que pertenecen a nobles, miembros de la realeza y abades del monasterio.

La Ruta del Císter: un plan para los más aventureros

Monasterio de Poblet
Monasterio de Poblet – Alberto Gonzalez Rovira / Flickr.com

La Ruta del Císter une los tres monasterios más importantes de Cataluña. Si te animas, podrás admirar los monasterios de Vallbona de les Monges, Santes Creus y el de Poblet. Se recomienda recorrerla principalmente a los amantes de la bici y del ciclismo, pues la longitud del recorrido es de 108 kilómetros.

Aun así, también es apto para quienes prefieran el senderismo, ya que el camino está muy bien señalizado y la ruta no supone mucha dificultad. Sin duda, esta ruta puede hacer de tus vacaciones una experiencia inolvidable. Y es que recorrer esos 108 kilómetros tiene su mérito.

“Vivimos en un mundo maravilloso que está lleno de belleza, encanto y aventura. No hay un límite para las aventuras que podemos tener siempre y cuando las busquemos con los ojos bien abiertos”.

-Jawaharial Nehru-

Ya sea mediante una ruta o en coche, ¡no puedes perderte el monasterio de Poblet! Uno de los monasterios más emblemáticos de toda España que te fascinará por la majestuosidad de los edificios que lo componen.