Los pros y los contras de hacer un crucero
Hacer un crucero es una de las múltiples alternativas que tenemos a la hora de viajar. En realidad, no son para todo el mundo porque, al igual que implican una serie de lujos y comodidades, lo cierto es que es posible que a los más aventureros les resulten algo sosos.
Existen muchos mitos en torno a los cruceros. En algunos hay algo de razón, pero en otros casos son simples suposiciones. Para desvelar los pros y los contras de hacer un crucero, te extendemos la invitación a navegar con nosotros en este artículo.
Las ventajas de hacer un crucero
Es un viaje relajado
Hacer un crucero da la posibilidad de estar alejado de todo y en contacto con la inmensidad azul de un mar sin límites. A bordo se viven algunas de las sensaciones más poderosas que se pueden experimentar. Los amaneceres y los ocasos, al igual que los olores y los sonidos, serán sensaciones que quedan instaladas en los corazones.
Variedad de paradas
Existe gran variedad de cruceros, por lo que el número de paradas dependerá en gran medida de la extensión y tipo de trayecto. En este sentido, es similar a los viajes aéreos con escalas, solo que en mayor cantidad. Esto brinda la posibilidad de conocer muchos lugares y tener una mirada ampliada acerca de las particularidades de cada región.
El entretenimiento
Los cruceros cuentan con espacios específicamente dedicados a divertir y animar a los pasajeros. Los hay para todas las edades, desde niños pequeños hasta adultos. Las actividades son coherentes según la edad y suelen tener un alto nivel de profesionalidad. Incluso hay juegos de todo tipo y shows de carácter internacional. Por ello, son ideales para viajar en familia.
La gastronomía
En los cruceros hay una gran diversidad de menús a cualquier hora del día o de la noche. La oferta gastronómica se adapta a todos los gustos. Esto significa que no solo hay restaurantes convencionales, sino especializados en comidas de diferentes partes del mundo. También los hay para quienes tienen predilección por los buffets y las comidas rápidas.
Hacer amigos
Probablemente lo más valioso de los cruceros es la posibilidad de relacionarse con otros por un corto periodo de nuestras vidas. En un crucero es posible conocer gente nueva y de otras latitudes. Prima un ambiente familiar, el cual es propicio para establecer nuevas amistades, intercambiar ideas y pasar ratos agradables. De ahí que haya muchos cruceros para solteros.
Confort y todo en uno
Los cruceros cuentan con personal capacitado para atender y satisfacer cualquier necesidad de los viajeros, lo que hace sentir especial a cualquier persona. Además, los barcos cuentan con piscina, jacuzzis, restaurantes, teatro, bares y discotecas, servicios que en su mayoría están incluidos en los paquetes.
Los contras de hacer un crucero
Excursiones
Dentro del paquete que ofrecen los cruceros pueden incluirse excursiones o no. En caso de que se incluyan, suelen ser bastante costosas. Si, por el contrario, las organiza el mismo viajero, estarán sujetas al itinerario de la embarcación. Esto puede implicar pérdidas en algunos casos debido a algún contratiempo.
Planificación y destinos
Hacer un crucero implica realizar paradas de tan solo unas horas o, como mucho, un día. Esto necesariamente implica haber planificado con suficiente antelación lo que se piensa hacer. En este sentido, es imprescindible ser muy organizado y puntual, ya que el barco no espera a nadie. Además, por regla general, el tiempo no alcanza para conocer bien esos destinos.
Internet muy costoso
Aunque siempre existe la posibilidad de incluir o no el uso de Internet dentro del paquete de servicios adicionales, en general tiene precios muy elevados. Este aspecto resulta especialmente molesto para la mayoría de usuarios, ya que hoy por hoy vivimos en un mundo globalizado donde esta herramienta es imprescindible para la mayoría de personas.
Congestiones
Los días que está navegando la embarcación, como es de suponer, se encuentran en él todos los pasajeros. Por este motivo, hacer un crucero a veces implica congestiones, especialmente en los restaurantes. En otros momentos la congestión puede estar en la piscina, lo que obliga a tener que desarrollar otra actividad.
Modificaciones en el itinerario
Por lo general, los cruceros no modifican su itinerario. Sin embargo, esto puede suceder ocasionalmente. En la mayoría de los casos tiene su origen en el estado del tiempo o razones de fuerza mayor, que obligan a la tripulación a tomar estas decisiones. En cualquier caso, esto significa reducir tiempos de escalas o incluso cancelarlas.