La plaza de Armas de Arequipa: el origen de una ciudad

Es el centro de la ciudad de Arequipa, el espacio fundacional en el que se hallan la catedral y el edificio de la municipalidad.
La plaza de Armas de Arequipa: el origen de una ciudad
Cristina Moreno

Escrito y verificado por la historiadora del arte Cristina Moreno.

Última actualización: 07 julio, 2023

La plaza de Armas de Arequipa es el punto neurálgico de esta ciudad del Perú. Allí se concentran los principales edificios e instituciones y es el lugar de encuentro y celebración de la población. Es un espacio por el que pasear y deleitarse, convirtiéndose así en un enclave único y majestuoso. ¿Te vienes con nosotros a conocerla?

La plaza de Armas: lugar donde nació Arequipa

La plaza de Armas de Arequipa es mucho más que un precioso espacio urbano y arquitectónico. Allí se llevó a cabo la fundación de la ciudad. En 1540 y por orden de don Garcí Manuel de Carvajal, se llevó a cabo una misa y el acto de fundación de esta villa peruana, con el correspondiente procedimiento de trazar las calles a cordel.

Este acto tan solemne tuvo lugar el 15 de agosto, por lo que la ciudad tomó el nombre de Villa Hermosa de Nuestra Señora de la Asunta. Si bien, a lo largo de los siglos fue añadiendo más nombres y medallas que los reyes de España le fueron otorgando.

Así, este espacio se convirtió en el centro de la ciudad y allí se instalaron el cabildo y la catedral, así como la cárcel, algunas capillas y las casas de los principales personajes que habían participado en la creación de esta preciosa ciudad.

Qué ver en la plaza de Armas de Arequipa

En la actualidad, sigue siendo el espacio principal de la ciudad. Es una plaza que cuenta con 110 metros de largo en cada lado, coincidiendo así con el resto de las manzanas o cuadras fundacionales. En la misma podrás deleitarte con las increíbles vistas de la catedral mientras repones fuerzas para seguir descubriendo lo que la hermosa ‘Ciudad Blanca’ te brinda.

1. Disfrutar de la impresionante fachada de la catedral

Catedral de Arequipa

Presidiendo el lado este encontramos la imponente catedral de Arequipa. Se trata de una construcción de estilo neoclásico que desarrolla su fachada en su lateral. Y es que a este impresionante edificio se accede por el lado derecho y no por los pies.

La fachada ha sufrido muchas variaciones debido a los múltiples terremotos que ha sufrido la ciudad, pero aún mantiene su esencia. Toda ella se encuentra enmarcada por altas torres y el atrio está delimitado por impresionantes arcos que cuentan con tallas florales.

2. Recorrer los portales de la plaza de Armas

Son tres portales o galerías abiertas para permitir el transito de la gente, protegiéndose del impetuoso sol o de la lluvia. Se denominan portal de Flores, portal de San Agustín y portal de la Municipalidad. El último, frontero a la catedral, es el único de los lados que no cuenta con uno de estos soportales.

En ellos podrás disfrutar de restaurantes, tiendas, platerías y de un mercado de artesanía de lo más popular, este último en el portal de Flores. Están construidos en piedra granito de la zona y cuentan con múltiples arcos. En el interior tienen bóvedas de arista y en origen eran de una sola planta, hasta que a finales del siglo XIX y principios del XX se construyó la segunda planta.

Arcos de la Plaza de Armas de Arequipa

3. Visitar el mercado de Flores

En el Portal de Flores se encuentra el mercado de Flores. Se trata de un mercado en el que puedes encontrar los productos artesanales más característicos de Perú, de Arequipa y del cercano valle del Colca. Puedes comprar desde un bolso hasta un poncho, pasando por unos guantes o una joya de plata.

El mercado se encuentra instalado en una antigua casona colonial que perteneció a la familia Flores del Campo, una de las más grandes y extraordinarias de la ciudad. Lamentablemente, se encuentra en un estado bastante lamentable, sin embargo, pasear por el mercado te permitirá apreciar algunas de sus salas.

4. Conocer al Tuturutu

Plaza de Armas de Arequipa

El Tuturutu es un personaje mítico hecho en bronce que corona la fuente ornamental que hay en el centro de la plaza de Armas de Arequipa. Según cuenta la leyenda, era el mensajero oficial del inca Mayta Capac que anunciaba el reparto de encomiendas, de víveres o semillas.

Lo anunciaba por medio de su trompeta, que emitía un peculiar soniquete: ¡Tuturutúúú. Tuturutu! Una noche, de tanto frío, murió congelado y amaneció petrificado. Así que lo instalaron sobre la pileta, como llaman a la fuente. Y desde entonces vigila constantemente la plaza.

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