Las montañas de Tianzi en China: escenario de la película 'Avatar'
Seguro que has visto Avatar (¿quién no?), una de las películas de ciencia ficción más taquilleras de la historia. Lo que quizás no sepas es que Pandora no está tan lejos como se muestra en ella. De hecho, uno de sus escenarios se encuentra en China y se puede visitar. Sigue leyendo para descubrir más sobre las montañas de Tianzi, el paisaje en el que se inspiró James Cameron.
Cómo llegar a las montañas de Tianzi
Las montañas de Tianzi se encuentran en el norte del área de Wulingyuan. Es una región de interés panorámico e histórico que forma parte de la provincia china de Hunan. La Reserva Natural de la Montaña Tianzi es una de las varias reservas que forman Wulingyuan y está dentro del territorio de Zhangjiajie.
Por lo tanto, se puede llegar hasta ella desde la ciudad de Zhangjiajie, uno de los mayores destinos turísticos de China. Zhangjiajie está muy bien comunicada y se puede ir en avión, tren, coche o autobús.
Salen autobuses turísticos desde la Estación Central de Autobuses de Zhangjiajie hasta Tianzi Mountain periódicamente. Se pueden coger allí y el trayecto dura unos 80-90 minutos.
Eso sí, ten en cuenta que el complejo abre de 7:00 a 18:00. Los mejores meses para visitar las montañas de Tianzi son abril, mayo, septiembre y octubre.
Disfruta de las vistas de la mejor manera: monta en el teleférico
No te puedes perder la vista más impresionante de los picos. El teleférico recorre una ruta de más de 2 kilómetros de longitud con una caída de casi 1000 metros.
Como mínimo, el viaje dura unos seis minutos durante los cuales podrás admirar la increíble belleza de las montañas de Tianzi. El paisaje incluye todo el valle, los ríos de agua cristalina y la misma montaña.
La leyenda de las montañas de Tianzi
El nombre le viene de un hombre llamado Xiang Dakun. Fue el líder del grupo étnico Tu durante los últimos años de la dinastía Song (1127-1279).
Este hombre, Xiang Dakun, comenzó una revolución y se proclamó a sí mismo como ‘Tianzi’, que significa Hijo del Cielo. En el lugar, los visitantes podrán observar muchos sitios relacionados con la historia de Xiang Dakun.
La inspiración para la montaña Aleluya de Avatar, el hogar de los Na’vi
Estos impresionantes montes de arenisca que se formaron hace más de 300 millones de años fueron fuente de inspiración para el director James Cameron. Y no es de extrañar: el lugar rebosa magia. La frondosa vegetación, unida a las formaciones rocosas y a la bruma constante dotan a la reserva de un ambiente hermoso y aterrador a la vez.
Y es una de esas formaciones, la montaña Tianzi, la que ha pasado a la gran pantalla como la montaña Aleluya, el hogar de los Na’vi. La alta y fascinante montaña que aparece en la película no es otra que la montaña Tianzi del sudeste chino.
“La fantasía no es una forma de evadirse de la realidad, sino un modo más agradable de acercarse a ella.”
-Michael Ende-
Aprovecha y haz un tour de Zhangjiajie
En Zhangjiajie encontrarás innumerables atracciones y lugares que no te puedes perder. Las montañas Tianzi es uno de ellos, pero hay muchos más. Aquí tienes una lista de ellos:
- El Gran Cañón de Zhangjiajie tiene el puente colgante de cristal más alto del mundo. No lo recomendamos para los que tengan vértigo, pero puede ser una experiencia inolvidable.
- El Parque Nacional de Zhangjiajie
- La montaña Tianmen
- El lago Baofeng
- La cueva del Dragón Amarillo
Además, te recomendamos que aproveches para degustar la comida típica. La gastronomía china es muy variada, como ya sabrás. Y la gastronomía de la provincia de Hunan mezcla los sabores salados de la gastronomía del norte de China con los dulces del sur. Además, hacen uso de sus propias especias, sobre todo el chili.
Destacan el pato a la cerveza, el tofu al estilo Changsha y el pollo Dong’an. Por supuesto, hay muchos más platos exquisitos y te animamos a probarlos todos, si tienes la oportunidad.
Las montañas de Tianzi y la región que rodea Zhangjiajie son un lugar de ensueño donde podrás disfrutar de la cultura china y admirar el poder de la naturaleza. No cabe duda de que la realidad es mucho más impresionante que una película fantástica, por muy buena que sea.