La Isla de la Gaiola: una de las más pequeñas en Nápoles
Tal como lo indica el título, la Isla de la Gaiola es una de las más pequeñas de Nápoles, en la región de Campania, Italia. Se encuentra frente a la costa de Posillipo, en el Parque Sumergido de Gaiola, que es nada más y nada menos que una pequeña área marina protegida.
Su nombre deriva de las cavidades que salpican la costa de Posillipo —del latín cavea, y en español ‘pequeña cueva’—, aunque originalmente era conocida como Euplea. Te invitamos a conocer esta isla que se encuentra en alta mar y que forma parte del Archipiélago Campaniano, de origen volcánico. Conocerás algunos datos muy curiosos de este pequeño lugar.
Isla de la Gaiola
La isla en realidad consiste en dos islotes muy pequeños. Uno de ellos tiene una gran villa residencial, mientras que el otro se encuentra deshabitado, pese a que están a pocos metros entre sí. Ambos se encuentran conectados a través de un sorprendente y misterioso puente de roca.
Esa es una de las particularidades que presenta la isla, que hace que un sitio tan pequeño sea maravilloso, enigmático y, por supuesto, difícil de olvidar. ¿Quieres conocer más particularidades? Si es así, te interesará conocer más sobre el Parque Sumergido de Gaiola.
Parque Sumergido de Gaiola
La isla se encuentra en el centro del Parque Sumergido de Gaiola, un área protegida increíble que tiene la particularidad de estar bajo el mar. Posee una superficie de 42 hectáreas de mar, que rodean a la isla de la que estamos hablando. El parque se extiende desde el burgo de Merechiaro hasta la Bahía de Trentaremi.
Este lugar posee una gran importancia natural, paisajística, biológica e histórico-arqueológica. El Centro de Estudios Interdisciplinarios Gaiola Onlus —conocida por sus abreviaturas en italiano, CSI Gaiola Onlus— trabaja en la investigación científica y su divulgación, con la posibilidad de integrar a visitantes en charlas, talleres educativos y visitas guiadas.
De acuerdo con la Superintendencia Arqueológica de Nápoles, el CSI Gaiola Onlus ha desarrollado un proyecto de valorización que integra la parte turística y cultural de la zona.
Por este motivo es que ofrecen diversas rutas turísticas, en las que se presta especial atención a la naturaleza y la arqueología. Los guías acompañan a los visitantes a descubrir lugares poniendo a su disposición información histórico-arqueológica, geológica-vulcanológica y flora-faunística de la zona durante todo el recorrido.
Por si eso aún no te deslumbra, te contamos que no hay nada mejor que conocer el Parque Sumergido de Gaiola, ¡sumergiéndote en él! Puedes hacer buceo, snorkelling o incluso navegar por la superficie en barco o kayak. Las opciones son muchas, e incluso en la pequeña Isla de la Gaiola, puedes elegir lo que más te atraiga.
La Isla de la Gaiola también posee un lado oscuro
La Isla de la Gaiola es bellísima por donde se la mire. Su importancia en todos los aspectos citados con anterioridad contribuyen a que sea un espacio lleno de vida sorprendente y escenarios naturales asombrosos. Sin embargo, hay un dicho que dice «no todo lo que brilla es oro» y eso aplica también para este destino.
En los inicios del siglo XIX, la isla estuvo habitada por un ermitaño apodado como El Mago, que vivió de la limosna de los pescadores. Poco después comenzó la construcción de la villa, aunque no se sabe su fecha exacta. Lo que sí se sabe es que en el año 1926 pasó a ser propiedad de un profesor suizo llamado Hans Braun.
La historia cuenta que Hans Braun construyó —o mandó a construir— un teleférico para conectar la playa con la isla. Una noche, el teleférico fue alcanzado por un rayo y terminó con la vida de su esposa, quien cayó al agua y se ahogó. Braun fue encontrado al día siguiente con un disparo en la cabeza. Al poco tiempo, Otto Grumbach, un amigo que estaba invitado en la casa, se suicidó también.
Desde entonces, hay leyendas que sostienen que la Isla de la Gaiola es un lugar «maldito». Así como la historia de Braun, se conocieron otras de dueños ricos de la isla que se suicidaron, que han perdido familiares de formas trágicas o que han quedado en quiebra. Lo más curioso es que no fueron apenas un par, sino varios, y casi siempre de forma sucesiva.
Se dice que incluso toda esa maldición viene desde la magia más antigua de la época romana. La zona se encuentra salpicada de ruinas de aquella época; por ejemplo, allí se encontraba la casa de Publio Vedio Polión, un noble romano amigo del emperador Augusto. La historia cuenta que les daba de comer a sus anguilas los cuerpos de sus esclavos y que, tras su muerte, sus restos descansan allí.
Una isla llena de hermosos lugares, y también misterios
No dejes que las leyendas de la Isla de la Gaiola te imposibiliten visitarlas; al fin y al cabo, se trata de eso: leyendas. Hay muchas más razones para visitarla que las que no. Si por el contrario te encantan las historias oscuras, ¡tienes otra buena razón para ir!
Déjate sorprender por esta isla pequeña pero llena de hermosos lugares naturales por descubrir y explorar e historias por escuchar. Además de admirarla, no te pierdas la oportunidad de disfrutar de algunas actividades ofrecidas en la Isla de la Gaiola.
- Gaiola, Un Mare di Vita... un Mare di Storia. Itinerari tra terra e mare alla scoperta del mare di Napoli. Centro de Estudios Interdisciplinarios Gaiola Onlus. https://www.gaiola.org/visite-guidate