La isla de Vis, un paraíso frente a las costas de Croacia
¿Quién no ha deseado descubrir lugares mágicos alguna vez? Puede ser una duna desde la que admirar la puesta de sol, ese pueblo recóndito, esa cascada o incluso una isla paradisíaca. Ha llegado el momento. En Croacia se encuentra la preciosa isla de Vis. Paraíso para muchos y magia para otros, lo tiene todo para ser un sitio realmente especial. ¿Quieres saber por qué? ¡Allá vamos!
Situación e historia de la isla de Vis
La isla de Vis es una isla situada en el mar Adiátrico. Tiene una superficie de 90,3 km² y en ella habitan cerca de 3.500 personas. Se comunica con Split, la mayor ciudad de Dalmacia (y región sur de Croacia) a través de un ferry.
Su historia nos lleva al pasado de poblados prehistóricos y griegos, y así fue hasta que en el siglo III a.C. fue conquistada por los romanos. Durante la Edad Media formó parte del famoso Imperio bizantino, cuyo legado puede apreciarse en bellas ciudades como Estambul.
Durante el siglo XIX fue escenario de disputas entre Francia e Inglaterra y, finalmente, entre Austria-Hungría e Italia. De igual manera, también fue uno de los escenarios de la Segunda Guerra Mundial, al utilizarse como base militar.
Isla de Vis: el rincón perfecto de Croacia
Pese a tener un pasado lleno de historia, la isla de Vis ha sido capaz de sobrevivir a los asentamientos humanos sin perder su encanto. Debido a su lejanía con la costa de Croacia, se trata de un lugar paradisíaco y, sobre todo, natural.
Esto en parte se debe a que hasta el año 1989 no fue abierta a los extranjeros, ya que era un punto estratégico y militar de la Antigua Yugoslavia. A partir de esa fecha, sin embargo, la isla se convertía en un importante foco turístico. Un destino tranquilo, ideal para el relax y para viajes en pareja.
Además, es el lugar perfecto para degustar el pescado más fresco del país debido a su tradición pesquera. Pero sobre todo, se trata de un lugar lleno de cuevas, calas y playas de arena que nada tienen que envidiar al Caribe.
Qué ver en la isla de Vis
La isla tiene dos pueblos situados a la orilla de dos grandes bahías. El primero, más al noreste se llama Vis y el segundo Komiža, al suroeste.
Vis es la primera colonia de la isla, situada a orillas de una bahía con forma de herradura. Es uno de los principales lugares turísticos de la isla, ya que hay restos de un cementerio griego, baños romanos y una fortaleza levantada durante las guerras napoleónicas.
Además, parte de la historia de la isla de Vis se puede conocer en el Museo de Arqueología. En su interior hay varias exposiciones que cuentan la historia de la isla desde su variedad étnica, su pasado pesquero y el legado de todas las sociedades.
Si te decides a visitar la isla, te recomendamos bañarte y disfrutar de sus playas. No dejas de estar en un lugar recóndito de Europa. Y además, déjanos decirte que la isla de Vis ¡es un lugar de cine! Aquí se han rodado películas como la segunda parte del musical Mamma mia.
También te aconsejamos disfrutar de los paisajes, por ejemplo de la Cueva Verde, una abertura donde puedes entrar buceando o en barca. Tardarás en llegar, pero merecerá la pena.
Cómo llegar a la isla
Desde Slipt sale todos los días un ferry que también lleva vehículos. Está pensado para los isleños que van a trabajar, más que para los turistas. No obstante, durante el verano existen ferrys especializados que salen los fines de semana a las 9 de la mañana y regresan a las 6 de la tarde.
La isla tendrás que recorrerla en coche o, como mucho en autobús, aunque solo hay una línea y, salvo que vayas en temporada alta, te tocará esperar. Por tanto, lo más lógico es alquilar un coche y llevártelo hasta la isla. De hecho, las carreteras discurren cerca de grandes acantilados que te proporcionarán unas vistas impresionantes.
“Viajar, primero te deja sin palabras, luego te transforma en un contador de historias.”
-Ibn Battuta-
¡Y eso es todo! ¿Te ha parecido interesante? No dejes escapar la oportunidad de descubrir lugares únicos durante tu paso por Croacia. Prepara la toalla, la crema solar y las gafas de sol porque ¡nos vamos al paraíso!