Qué hacer para evitar gastos extra al viajar
El presupuesto que diseñamos para irnos de vacaciones nunca es suficiente. No importa si hemos decidido dormir en un hostal, hacer autostop o pagar un “todo incluido”. Parece que siempre gastamos de más. ¿Por qué nos ocurre esto? Porque nos relajamos, queremos darnos ciertos gustos o no medimos las consecuencias.
No queda más remedio que controlar lo que se gasta, por eso en este artículo te damos algunos consejos para evitar gastos extra si estás de viaje. ¡Toma nota!
Consejos para no derrochar dinero en las vacaciones
Si tienes en cuenta estos consejos no existirá ciudad costosa, hábitos consumistas ni tentaciones que puedan hacerte gastar de más cuando te vas de viaje. Podrás ahorrar bastante sin renunciar a la comodidad, ni tampoco tendrás que pasar hambre, frío o dormir a la intemperie. ¡Es solo una cuestión de organizarse y ser comprometido!
“Cuida de los pequeños gastos; un pequeño agujero hunde un barco.”
-Benajmin Franklin-
Analiza tu situación financiera
Muchas personas se van de vacaciones sin realmente prestar atención a cómo se encuentran económicamente. Esto es un error. Comprar todo con tarjeta tiene su doble cara, ya que, por supuesto, en algún momento hay que pagarlo.
Por otra parte, adquirir un paquete de vacaciones y pagarlo a plazos es incurrir en una deuda y nunca salir del círculo vicioso que se crea con la financiación.
Haz cuentas
Busca datos sobre los costes básicos en el destino que te gustaría ir. Puedes determinar un presupuesto y seguirlo lo más al pie de la letra posible. La idea no es ir de viaje para pasar necesidades con tal de estar en la playa, sino que la estancia sea agradable.
Elabora una lista con todos los gastos y analiza si vale la pena. Quizás puedas ir a otro lugar, quedarte menos días o buscar un alojamiento más asequible.
Planifica con anticipación
Es preciso que realices una lista con las actividades que tienes pensado hacer y qué lugares visitarás. Si es posible consigue billetes, entradas o transporte con tiempo para ahorrar e ir pagando, si es que lo abonas con tarjeta de crédito.
Aprovecha las oportunidades
No empieces a planificar tus vacaciones unas semanas antes de la fecha de salida. Si ves que con meses de antelación en el periódico, televisión o cualquier medio aparecen ofertas interesantes trata de adquirirlas. Esto tiene muchas ventajas, además de sacar provecho a una promoción.
Es buena idea porque empezarás a abonarlo antes de irte y tendrás más “liberada” la tarjeta y porque podrás elegir con más calma desde la habitación del hotel hasta el medio de transporte.
Evita los gastos irrelevantes
En las vacaciones tenemos mucho tiempo libre y para llenar esas horas nos ponemos a pensar todas las cosas que podríamos adquirir. Por otra parte nos encontramos en un sitio que difiere de nuestro hogar y todo nos llama la atención. Ni que hablar si en el destino hay centros comerciales, mercadillos o tiendas de recuerdos.
Pero no debemos gastar en cosas que, o bien no nos servirán, o no necesitamos. ¿Para qué pagar un hotel “todo incluido” si no bebemos alcohol o nos pasaremos el día fuera? ¿Es preciso contratar un city tour cuando podemos pasear a pie por nuestros propios medios? ¿Por qué no en lugar de quedarse dos semanas sólo lo haces algunos días? Plantea esto en familia y tomad una decisión.
Controla lo que gastas
Estar de vacaciones no te da vía libre para hacer estragos en tu economía. Esto quiere decir que puedes seguir llevando una vida moderada, aunque estés a miles de kilómetros de casa. Puedes llevar una lista e ir anotando todo lo que consumes. No olvides colocar al lado la suma diaria para poder hacer un promedio y analizar en qué momentos se gastó más.
Busca rutas alternativas
El mismo souvenir o menú puede costar más o menos según donde te encuentres. Claro, porque no es igual beber un café mirando la torre Eiffel que hacerlo a 5 calles del monumento más importante de Francia. Las tiendas céntricas son menos asequibles que las que se alejan un par de centenares de metros.
Usa el transporte público
El metro, el autobús y el tren son perfectos medios de transporte durante tus vacaciones. Te harán ahorrar bastante en comparación con un taxi o un alquiler de coche. Si puedes, mejor camina o anda en bicicleta. Harás un bien a tu salud y gastarás menos.
La buena noticia es que todos estos consejos los puedes aplicar también en casa aunque no estés de vacaciones.