El castillo templario de Ponferrada: ¿Que esconde?
El castillo templario de Ponferrada es uno de los más bonitos que legó esta orden militar al Reino de Castilla. Se encuentra ubica en la provincia de León, sobre una colina, divisando majestuoso las tierras de El Bierzo y la confluencia de los ríos Sil y Boeza. ¿Nos acompañas a visitarlo?
El origen del castillo templario de Ponferrada
Esta fortaleza es, tal vez, una de las más importantes que estuvieron en posesión de los caballeros de la Orden del Temple dentro de las tierras que pertenecían al Reino de Castilla. Pero este emplazamiento en el que se encuentra, ya era fundamental muchos siglos antes de la llegada de estos religiosos.
Se cree que el origen de este castillo templario medieval se encuentra en un castro celta. Un poblado que poco a poco fue adquiriendo cada vez mayor relevancia hasta su ocupación en 1178 por los caballeros del Temple. Dicha ocupación tuvo lugar gracias al rey Fernando II de León y serán los templarios quienes comiencen la transformación de la fortificación ya existente.
Pocos años después, en 1196, el castillo pasaría a manos de la Orden de San Juan. Ello debido a que, en las trifulcas entre Alfonso VIII de Castilla y Alfonso IX de León, los templarios se pusieron de lado del primero, quien acabó perdiendo. Aunque poco después volvería a sus manos.
Su historia tras la caída del Temple
Pero ante la eminente caída de la Orden del Temple, Rodrigo Yánez, último maestre de la Orden en León, entrega la villa y el castillo al infante don Felipe, para que estos no sean confiscados. Así, se produce un nuevo cambio de manos del castillo, que después pasaría a Pedro Fernández de Castro, mayordomo de Alfonso XI, a cuya familia pertenecería hasta casi finales del siglo XIV.
El castillo, continuaría su periplo pasando de una mano a otra hasta llegar a don Pedro Álvarez Osorio, primer conde de Lemos quien, le daría el aspecto con el que cuenta en la actualidad. Pero este castillo continuó siendo motivo de disputa. Así, la hija del conde de Lemos y su nieto se disputaron el castillo a finales del siglo XV.
Y pese a habérsele adjudicado a ella, doña Juana Osorio, finalmente tendrían que actuar los Reyes Católicos formando un imponente ejército. Poco a poco se fue deteriorando hasta que fue nombrado Monumento Nacional y comenzaron los trabajos de restauración.
¿Qué podemos ver en el castillo de Ponferrada?
El castillo templario de Ponferrada que podemos ver en la actualidad es una imponente pero a la vez elegante fortaleza. De arquitectura muy armónica en la que destaca el juego de torres y almenas. Se trata de un castillo con recinto poligonal en el que se pueden distinguir varias partes. Además de un foso que rodeaba tres de sus flancos, mientras que el lado noroccidental estaba protegido de forma natural por el río.
La parte más antigua es la que se corresponde con la etapa templaria. De ella, quedan algunos restos de muralla y la barbacana que da acceso al patio. Una torre de forma elíptica y la llamada del Malvecino, además de otras torres y un paseo de ronda que las conecta. Y un aljibe situado en una torre albarrana.