4 curiosidades de los monumentos dedicados a Colón
Es común pasear por algunas ciudades y encontrar monumentos dedicados a Colón. El almirante genovés pasó a la historia por llegar a América el 12 de octubre de 1492. Por esta razón, se han erigido estatuas en su memoria a ambos lados del Atlántico. Y en algunos casos guardan datos o historias curiosas.
¿Quién fue Cristóbal Colón?
Cristóbal Colón es uno de los principales iconos de la historia mundial. En sus tiempos de cartógrafo, sostuvo que se podía llegar a las Indias desde Europa atravesando el Atlántico hacia el oeste, en vez de por el este atravesando el Mediterráneo.
Muchos le tomaron por loco, pero él sostuvo hasta el final que se podía realizar el viaje con posibilidades de éxito. Tan solo la reina Isabel la Católica creyó en sus palabras y financió su viaje.
Así pudo embarcar, pero llegó no a las Indias, sino a un lugar del que no se tenía constancia: América. Tras dos meses de viaje, en octubre pisaba la isla de Guanahani, localizada en las Bahamas.
La figura de Cristóbal Colón fue muy importante para la historia, entre otras razones, porque gracias a su primer viaje se inició la expansión mundial de los países europeos. Y con ellos llegaba una nueva etapa: la Edad Moderna.
“El mar dará a cada hombre una nueva esperanza, como el dormir le da sueños.”
-Critóbal Colón-
Curiosidades de los monumentos dedicados a Colón
Muchos países, sobre todo España, honran al almirante a través de los distintos monumentos en memoria de sus actos y servicios a la Corona. En total, se calcula que hay aproximadamente unos 500 monumentos dedicados a Colón. Y algunos de ellos esconden datos que te resultarán interesantes. Vamos a verlos.
1. El monumento de Colón de Barcelona no apunta a América
Una de las posturas más populares de los monumentos dedicados a Colón es con su brazo apuntando al oeste, es decir, señalando hacia el lugar en el que se encuentra América.
Sin embargo, la estatua que se levanta al final de las Ramblas de Barcelona es una excepción a la regla. El dedo de Cristóbal Colón no apunta a América, sino a Italia. Esto no se debe a ningún error, parece que se decidió poner a Colón apuntando al mar porque si se hacía apuntando al continente la gente no lo iba a entender.
2. El primer monumento dedicado a Colón se realizó en Estados Unidos
En la ciudad de Baltimore, en Estados Unidos, se alza el primer monumento dedicado a Colón. Se realizó a finales del siglo XVIII. La escultura fue donada por el cónsul de Francia a la ciudad, situada a 60 kilómetros de Washington DC.
Quizás sea el monumento más antiguo, pero es el que más problemas ha sufrido. Recientemente, ha sido objeto de polémicas entre los ciudadanos de Baltimore, pues ha sufrido varios destrozos durante la celebración del día de la Hispanidad.
3. La estatua de Colón de Alemania no es la verdadera
También en Alemania se celebra y honra la memoria de Cristóbal Colón con un monumento en la ciudad de Bremerhaven. Fue levantado en el año 1897 por Ludwing Habich. No obstante, esta no es la estatua original que en su día un noble alemán cedió a la ciudad.
La estatua fue fundida en el año 1918 tras el estallido de la Primera Guerra Mundial. Las tropas alemanas estaban escasas de bronce, así que aprovecharon el material de la estatua. En el año 1978 se realizó una copia, ya que se conservaba el modelo original en yeso.
4. La estatua a Colón más grande del mundo se sitúa en Puerto Rico
En la ciudad de Arecibo, en Puerto Rico, se alza el monumento más grande en honor a la figura de Cristóbal Colón. Fue creada en el año 1991 y dio una vuelta al mundo hasta llegar a Puerto Rico. Hizo varias paradas en ciudades como Baltimore, Maryland, Miami, Nueva York y Ohio.
Mide 135 metros y es considerada la estatua de Colón más grande del mundo. No obstante, en su construcción se cometió un error: el timón que hay en las manos del almirante no pertenece a su época, ya que se utilizaban timones de caña en vez de timones de rueda.
Estas son las curiosidades más reseñables de algunos de los monumentos dedicados a Colón, pero no son los únicos. También hay estatuas en ciudades como Madrid, Londres, Santo Domingo, Nueva York, México o Buenos Aires.