Consejos para viajar a Laponia en Finlandia
Laponia, en Finlandia, es un destino muy singular. Es un lugar de larguísimos inviernos en los que no llega a salir el sol y donde las temperaturas siempre están ampliamente bajo cero. Y sin embargo, la temporada alta para viajar a Laponia es la invernal. ¿Cómo puede ser? Pues porque esa época este territorio se llena de la magia de la nieve, las auroras boreales y Papa Noel.
Llegar y moverse por Finlandia
Lo más habitual para llegar a Laponia es hacerlo volando a la capital del país, Helsinki. Además de visitar esta ciudad a orillas del Báltico, desde su aeropuerto se toman los vuelos nacionales a los aeropuertos lapones.
Son varios los aeropuertos que hay en territorio lapón. Están los de Kemi, Kittila o Enontekio. El de Ivalo es el ubicado más al cerca del Polo Norte y el de Rovaniemi es el más transitado.
Por cierto, en la Laponia de Finlandia están algunos de los dominios esquiables más grandes Europa. Además, para moverse por ahí en invierno es habitual recurrir a los esquís. Pues bien, puedes llevártelos si vuelas con la compañía aérea nacional, Finnair, no te cobrarán nada. Eso sí, debes especificarlo cuando compres tus billetes.
Muchos desplazamientos serán por carretera. Por ello, si no estás muy acostumbrado a conducir en condiciones gélidas, es mejor que contrates excursiones turísticas para olvidarte de viajes arriesgados.
¿Qué ropa llevar a la Laponia en Finlandia?
Las temperaturas del invierno lapón le hacen a uno pensar muy mucho el equipaje. Y desde luego, la ropa adecuada es algo clave para disfrutar de la experiencia. Es básico un buen abrigo impermeable, que se puede complementar con alguna chaqueta interna y jerseys de lana. Y no puede faltar la camiseta en contacto con nuestra piel.
Para las piernas, siempre dos capas: unas medias térmicas y el pantalón. O bien son recomendables los monos térmicos, que aunque un tanto incómodos son supercalientes. Una solución muy interesante si se viaja con niños. Algo muy habitual, dado que uno de los atractivos es conocer en persona al auténtico Santa Claus.
Por supuesto, hay que llevar botas de montaña, calcetines térmicos, gorro, braga polar, guantes… En fin, que se ha de llevar bastante ropa. Pero repetimos, es muy importante para gozar del lugar, si no, el frío puede arruinar el viaje, o tener que comprarse allí ropa a unos precios muy caros, lo que nos puede arruinar a nosotros.
¿Viaje organizado o no?
Está claro que todos aquellos a los que les gusta viajar por libre y organizarse sus vacaciones, en Finlandia lo van a poder hacer sin problemas. Prácticamente todo se puede contratar por Internet.
Otra opción más cómoda todavía puede ser optar por un paquete vacacional para Laponia en Finlandia. Estos paquetes lo incluyen todo, desde los desplazamientos a los hoteles y actividades. Cualquiera de las dos formas es interesante.
Quizás, la menos atractiva sea plantarse allí sin nada contratado. Primero, porque en temporada alta la ocupación es muy elevada en los lugares más turísticos. Segundo, porque para contratar cualquier cosa habrá que dominar el inglés. Y por último, porque algunas actividades pueden ser más caras si se contratan allí.
Qué no hay que perderse en Laponia
Esta región tan al norte del continente tiene muchos atractivos en forma de espesos bosques, hermosos lagos y poblaciones de cuento. Pero hay dos cosas que nadie se puede perder al viajar a Laponia en Finlandia.
Una es disfrutar de las auroras boreales. Ese fenómeno astronómico que se da en los cielos próximos al Círculo Polar Ártico. ¡No os lo perdáis! Os dejará sin palabras ese espectáculo de color provocado por el polvo que nos llega desde el Sol. ¡Imprescindible! Y muy fácil de ver casi todas las noches de invierno en esta zona del mundo.
Y el segundo gran atractivo del viaje a Laponia en Finlandia es Santa Claus. Él nació aquí y te espera en su casa para conocer a tus hijos y que le pidan directamente sus regalos de Navidad. ¡Hay que visitar a Papa Noel! Los peques están deseosos y los adultos volverán a creer en la magia por unos instantes.