Kronborg en Dinamarca, el castillo de Hamlet

Kronborg en Dinamarca, el castillo de Hamlet

Escrito por Adrián Pérez

Última actualización: 11 noviembre, 2016

¿Te gustaría conocer el castillo donde Shakespeare se inspiró para crear una de sus más famosas obras, Hamlet? Entonces no pierdas detalle, vamos a conocer la historia del fantástico y literario castillo de Kronborg, en Dinamarca.  Un edificio magnífico y con una larga historia.

Kronborg: de casa real a museo

Situado cerca de Elsinor, el castillo de Kronborg es uno de los cuatro monumentos de Dinamarca declarados Patrimonio de la Humanidad. Los otros tres son las runas e iglesia de Jelling, la catedral de Roskilde y el fiordo de Ilulissat.

Castillo de Kronborg
Castillo de Kronborg – Andrey Shcherbukhin

La historia de este castillo comienza en 1420 cuando el rey Erico de Pomenaria manda construir la fortaleza de Krogen. Ese lugar servía de “peaje” para los buques que deseaban salir o entrar al mar Báltico. Se trataba de una serie de edificios rodeados por un muro donde se cobraba y acumulaban los pagos hechos por las embarcaciones que pasaban por el estrecho de Oresund (que separa la isla de Selandia con Suecia).

El recinto adquirió su nombre actual gracias a Federico II, que ordenó construir en 1585 un castillo de estilo renacentista, único en su forma y tamaño de Europa. Este rey fue amante del teatro y cuando tuvo su corte en 1579 muchas obras fueron representadas en él.

En 1629 un incendio destruyó todo el castillo, a excepción de la capilla. Cristian IV logró reconstruir la fachada, aunque el interior nunca más volvió a tener su esplendor original. Cuando Suecia conquistó Kronborg, en 1658, se reforzaron las defensas con nuevas murallas, pasando a ser la fortaleza más fuerte del continente).

Castillo de Kronborg
Castillo de Kronborg – Andrey Shcherbukhin

Entre 1739 y 1900 fue usado como prisión y los condenados debían trabajar en los arreglos y fortificaciones del recinto. Los que cumplían penas menores podían reformar los exteriores y aquellos que habían cometido delitos mayores, como asesinato, solo podían hacer el trabajo duro intramuros.

En 1772 la cárcel recibió una “invitada” más que especial: la reina Carolina Matilde. Hasta 1922 Kronborg estuvo bajo administración militar y todas las reformas previstas se llevaron a cabo.

De paseo por el castillo de Hamlet

Si bien William Shakespeare indica en su obra que los hechos ocurren en el castillo de Elsinor, en realidad se refiere al de Kronborg. Por este motivo muchos amantes de la literatura y del escritor inglés en particular, eligen visitarlo cada año.

Castillo de Kronborg
Castillo de Kronborg – Don Fink

Además, desde el siglo XIX se realizan representaciones teatrales de Hamlet entre los meses de junio y agosto a las 4 de la tarde. Si vas en otra época del año puedes disfrutar de la visita guiada llamada “siguiendo la pista de Hamlet”, que permite descubrir los lugares donde transcurre la tragedia más conocida de la literatura inglesa.

“Sabemos lo que somos; pero no lo que podemos ser.”

– Fragmento de Hamlet, de Willian Shakespeare –

Un recorrido completo por Kronborg te lleva más o menos un día (abre de 10:30 a 17:30 hs en verano y de 11 a 16 hs en las demás estaciones). Además del castillo hay otras actividades para realizar: pasear por las casamatas y las salas, admirar los paisajes marinos, subir a las torres o relajarte pensando en su gran historia. También podrás recorrer el Museo Marítimo y algunas de las dependencias reales.

De paseo por Elsinor, la ciudad de Hamlet

Elsinore
Elsinor – Leonid Andronov

Si bien lo más destacado de la zona es el gran castillo de Kronborg, la ciudad portuaria de Elsinor (Helsingor en danés) es digna de recorrer. Fundada en 1231 por pobladores dedicados a la pesca, tomó importancia por hallarse en un lugar crucial para el tráfico marítimo escandinavo.

Otros castillos que merece la pena visitar son los de Frederiksborg, Fredensborg, Gurre Slot, Marienlyst y Vor Frue Kloster. Además, puedes conocer el monasterio Carmelite Priory, el Museo Histórico de Elsinor, la calle peatonal  y la iglesia de Santa María.