Te mostramos 5 rincones secretos de Barcelona

Te mostramos 5 rincones secretos de Barcelona
Armando Cerra

Escrito y verificado por el historiador del arte Armando Cerra.

Última actualización: 17 agosto, 2017

Hay lugares en la Ciudad Condal que es imprescindible contemplar, como sus grandes obras del modernismo o los testimonios históricos del Barrio Gótico. Sin embargo, la capital catalana tiene un sinfín de sitios atractivos, algunos desconocidos por la inmensa mayoría de turistas, e incluso por los propios barceloneses. ¿Cuáles son esos sitios? Pues ahora vamos a recorrer 5 rincones secretos de Barcelona que os van a sorprender.

Rincones secretos de Barcelona que debes conocer

1. El MUHBA

Rincones secretos de Barcelona, Plaza del Rey
Plaza del Rey – Artur Bogacki

Hay varios museos en Barcelona que alcanzan un renombre de enorme prestigio, como es el caso de Museo Nacional de Cataluña en Montjuïc. Sin embargo, hay museos poco conocidos pero cargados de interés, ese es el caso del MUHBA, el Museo de Historia de la Ciudad de Barcelona, ubicado en la Plaza del Rey.

Su moderno montaje expositivo sirve para descubrir toda la historia de la Ciudad Condal, ya que en el interior se pasa ante vestigios arqueológicos de diversas épocas: romana, visigótica y medieval.

Y por cierto, también pertenece a la Edad Media la capilla de Santa Ágata, integrada aquí. Una capilla decorada con el fantástico Retablo del Condestable pintado en el siglo XV y que es un obra cumbre del arte gótico catalán.

2. La Casa Vicens

Casa Vicens, uno de los lugares secretos de Barcelona
Casa Vicens – Tupungato

Es algo que sabe todo el mundo, Barcelona posee los mejores edificios de la arquitectura modernista y, concretamente de su creador más insigne, Antoni Gaudí. Pero quizás se desconozca que este arquitecto tiene muchas más obras en la ciudad que su Sagrada Familia, el Parque Güell o la Casa Milá. Y como muestra de ello aquí os presentamos la Casa Vicens.

Esta construcción, como otras de Gaudí, se encuentra en el barrio de Gracia, concretamente en la calle Carolinas, 24. Os recomendamos llegar hasta allí y deteneros ante su fachada. Os vais a sorprender con todo su repertorio decorativo inspirado en motivos orientales. Estamos seguros de que os va a encantar.

3. Refugios antiaéreos

Regugios anteaéreos, lugares secretos de Barcelona
Refugio de la Plaza del Diamante – Miquel / Flickr.com

No todos los restos históricos tienen que ser artísticos o hermosos. Algunos pueden ser sencillamente horribles, no tanto por su apariencia como por lo que evocan. Así ocurre con los viejos refugios antiaéreos que se guardan en Barcelona. Parte de ellos resistieron los bombardeos de la Guerra Civil Española.

Hoy en día se pueden visitar algunos, como el refugio de la Plaza del Diamante o el Refugio 307 en la calle Nou de la Rambla. Una experiencia que a nadie deja indiferente.

“Todos los viajes tienen destinos secretos sobre los que el viajero nada sabe”.

-Martin Buber-

4. Ermita de la Santa Matrona

Ermita de SantaMadrodn, uno de los lugares secretos de Barcelona
Ermita de Santa Madrona – Pere López / commons.wikimedia.org

Sorprenderá saber que en una metrópoli tan contemporánea y cosmopolita como Barcelona todavía se conserva alguna ermita de orígenes medievales. De hecho, en la montaña de Montjuïc siempre hubo un sinfín de estos templos populares. No obstante, solo ha llegado hasta nuestros días la ermita de Santa Madrona, ubicada en la calle Montanyans.

Este oratorio se construyó a principios del siglo XV, en la centuria siguiente la virgen de su interior fue declarada la patrona de la ciudad, aunque no sea un dato muy conocido. Lo cierto es que no es fácil visitar esta ermita, ya que solo abre una vez al año, durante la Pascua. No por nada se la considera de los rincones secretos de Barcelona.

5. La Font del Gat

Font de Gat, uno de los rincones secretos de Barcelona
Font del Gat – Ajuntament Barcelona / Flickr.com

¿A quién no le suena la canción de la Font del Gat? Lo que quizás no sepas es que es un fuente real, que está en pie y que se conserva perfectamente integrada en el interior de los Jardines de Laribal, una de las áreas ajardinadas más atractivas de toda la Ciudad Condal.

La fuente propiamente dicha, uno de los rincones secretos de Barcelona más curiosos, fue esculpida por el artista Antoni Homs en el año 1918, y hasta su emplazamiento era habitual que se acercaran muchos barceloneses a pasar un día de picnic y al aire libre.

Fue con el paso del tiempo cuando se compuso la canción por parte de Joan Amich, el cual seguramente en algún momento vio pasar por la Font del Gat una noia y un soldat (una muchacha y un soldado).