5 maravillas del planeta que no debes dejar de conocer
A lo largo de la historia de la humanidad, algunas culturas han sido capaces de realizar hazañas extraordinarias. Estas han logrado despertar la admiración y el asombro de otros pueblos, especialmente por la complejidad de sus obras y su belleza. Constituyen verdaderas maravillas del planeta que en algún momento deberíamos conocer.
El listado de las maravillas del planeta se remonta a Filón de Bizancio, un escritor, inventor e ingeniero griego del año 250 anterior a nuestra era. También parten de Maerten van Heemskrerck, un pintor del siglo XVI que pintó las siete maravillas arquitectónicas del mundo antiguo.
La catalogación de algo hecho por los seres humanos como maravilla no deja de tener aspectos subjetivos y constituye un convencionalismo reducir estas maravillas a solo siete. Lo cierto es que nuestro planeta está lleno de grandes tesoros de todo tipo que están ahí para ser admirados.
1. Una de las maravillas del planeta: los Guerreros de terracota, China
Los Guerreros de terracota se encuentran en el interior del mausoleo de Qin Shi Huang, quien fuera el primer emperador de China. Pertenecen a la dinastía Qin, que data del año 210 antes de nuestra era.
El enterramiento fue descubierto en 1974, en los alrededores de Xi’an, y fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. En el lugar de las excavaciones se han encontrado más de 8000 guerreros en terracota a escala natural. Todo un ejército en formación dispuesto para la confrontación.
Dichas esculturas, de una factura y realismo impactantes, fueron encontradas entre 4 y 8 metros de profundidad. A pesar de la cantidad, no hay dos personajes iguales. También se descubrieron caballos a escala natural y carruajes tirados por corceles, con una rica decoración e incrustaciones de plata y oro.
2. Hagia Sophia, Turquía
Hagia Sophia o Santa Sofía está ubicada en Estambul (Turquía). Fue una basílica ortodoxa , convertida luego en mezquita, y hoy es un museo. Construido en el año 360 de nuestra era, el templo fue dedicado a la Divina Sabiduría y no a Santa Sofía, como creen algunos.
Desde su construcción y hasta el año de 1453, fue la catedral ortodoxa bizantina de Constantinopla. Tras la conquista por parte del Imperio otomano, la edificación se transformó en mezquita hasta 1931. Finalmente, se convirtió en museo en 1935.
Es famosa por ser el modelo arquitectónico más importante de la época bizantina. Fue la catedral más grande del mundo durante casi mil años. La iglesia alberga una enorme colección de reliquias.
En el pasado tenía un iconostasio de plata de más de 15 metros de altura. Durante la dominación otomana se añadieron 4 minaretes y un mihrab como detalles arquitectónicos a la edificación. Constituye una de las más grandes maravillas del planeta.
3. La Acrópolis de Atenas, Grecia
La Acrópolis de Atenas es, sin duda, la más significativa de las acrópolis de la Antigua Grecia. Las acrópolis eran fortificaciones construidas en la parte más alta de las ciudades y tenían un carácter defensivo. Es otra de las maravillas del planeta.
Las acrópolis también eran sitios destinados al culto de los más importantes dioses griegos. Esta construcción se realizó a una altura de 156 metros sobre el nivel del mar. También se le conoce como Cecropia, en honor al primer rey de Atenas, llamado Cécrope.
La entrada a la Acrópolis se realiza por la puerta de los Propileos, que da acceso al templo de Atenea Niké. En el pasado contenía una enorme escultura de Atenea hecha de bronce. También aquí se encuentran el Partenón, el Erecteión (tribuna) y Teatro de Dioniso, donde se representaban las obras de Esquilo, Aristófanes y Sófocles.
4. Abu Simbel, Egipto: otra de las maravillas del planeta
Abu Simbel es un espacio arqueológico compuesto de varios templos egipcios. Se encuentra entre el lago Nasser y Asuan, a 231 kilómetros de su ubicación original. El complejo es parte del Museo al Aire Libre de Nubia y fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, en 1979 .
Para su construcción fue necesario excavar en la roca durante la dinastía del faraón Ramsés II (siglo XIII antes de nuestra era). Los templos se erigieron para conmemorar la victoria en el enfrentamiento de Kadesh. Representan tanto al faraón como a su esposa Nefertari, como una muestra de poder frente a los vecinos nubios de la época.
En 1968 fue necesario reubicar estos templos debido a la construcción de la represa de Asuán, de otro modo habrían quedado sumergidos en el lago Nasser. Abu Simbel sigue siendo uno de los complejos arqueológicos más visitados del mundo.
5. Catedral de San Basilio, Rusia
La Catedral de la Intercesión, más conocida como Catedral de San Basilio, es un santuario ortodoxo ubicado en la ciudad de Moscú. Se encuentra en la Plaza Roja y es conocida por sus hermosas y coloridad cúpulas con forma de bulbo. También forma parte del Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.
Se construyó durante el reinado de Iván el Terrible, entre 1555 y 1561, para celebrar la conquista del Kanato de Kazán. El arquitecto que diseñó y construyó esta basílica fue Póstnik Yákovlev, quien, además, participo en la edificación del Kremlin de Kazán.
El concepto inicial en la construcción de la catedral de San Basilio consistía en un conjunto de capillas en honor de varios santos. Sin embargo, dicha idea fue modificada por la de una torre central que unificara estos espacios en uno solo como símbolo de unidad. Su majestuosidad la convierte en una de las más grandes maravillas del planeta.