Las cuevas más asombrosas del planeta

Las cuevas atraen a muchas personas en el mundo. Su exótica belleza a veces alcanza dimensiones poco imaginables. Son lugares únicos donde se accede a escenarios poco comunes y extraordinariamente hermosos.

Vamos a conocer algunas de las cuevas más asombrosas que existen. Son formaciones geológicas en cuya creación intervienen los elementos de la naturaleza y el paso del tiempo como agentes estructurales. Estos elementos se refieren, fundamentalmente, a procesos erosivos provocados por el agua, el viento o la lava.

Misteriosas y encantadores a la vez, muchas veces las cuevas son espacios verdaderamente gigantescos y de una belleza extraordinaria. Además, son nicho de especies endémicas que solo se encuentran allí. También constituyeron la primera forma de vivienda de los seres humanos.

Así, las cuevas son auténticas catedrales naturales que nos conectan con el interior de la Tierra. También son lugares fascinantes por el misterio que albergan y, en la actualidad, lugar de destino para los aventureros y los espeleólogos. La mayoría son lugares que vale la pena visitar, pero nosotros queremos enseñarte algunas de las cuevas más asombrosas que existen.

1. Son Doong en Vietnam, una de las cuevas más asombrosas

La cueva de Hang Son Doong está considerada como la más grande del mundo. Tales son sus dimensiones, que cabrían varios rascacielos en su interior. En algunos puntos alcanza 200 metros de altura, 151 metros de ancho y la información más reciente habla de más de 9 kilómetros de longitud.

También tiene un río y varias lagunas. De hecho, algunos afirman que tiene clima propio. Está ubicada en el Parque Nacional Phong Nha-Ke Bang, en la zona central de Vietnam. Tiene entre tres y cinco millones de años y fue descubierta en 2008. Esconde estalagmitas de hasta 80 metros y muros de hasta 60 metros.

La única entidad autorizada por el gobierno para hacer tours en este lugar es Oxalis, que ofrece planes de 4-5 días y un costo de 3000 dólares estadounidenses. Esto incluye hotel y camping, alimentación, caminatas, entrenamiento, escalada y contacto con pueblos autóctonos. Solo está disponible entre los meses de febrero y agosto.

2. Cueva de la Flauta de Caña en China

La cueva de la Flauta de Caña se encuentra cerca de la ciudad de Guilin, en la región de Guangxi Zhuang, al suroriente de China. Su nombre obedece a la presencia de cañas de bambú con las que aún hoy se elaboran flautas y que se encuentran a la entrada de la cueva.

Aunque la cueva cuenta con más de 500 000 años de antigüedad, fue descubierta hace 1300 años, durante la dinastía Tang. A mediados del siglo XX sirvió de refugio a más de 1000 personas durante la Segunda Guerra Mundial. Tiene más de 240 metros de profundidad y un lago interior.

Se encuentra debajo de un río que filtra sus aguas a través de la roca caliza, originando multitud de formas y colores. Cuenta con una ambientación de luces que amplifica el efecto surrealista del lugar. A la cueva se puede acceder con una visita guiada, que tiene un coste cercano a los 10 dólares y un recorrido que dura aproximadamente 90 minutos.

3. Cuevas de Mármol en Chile

Las cuevas de mármol se originaron a partir de procesos erosivos entre el agua del lago General Carrera y los minerales de carbonato de calcio presentes en la roca. Se encuentran ubicadas en Aysén, en la zona austral de Chile.

Los diferentes tipos de mármol corresponden al periodo paleozoico, mientras que el lago es de origen glaciar. Destacan por las diferentes franjas, formas y colores, que vienen dándose por fenómenos que se producen desde hace más de 15 000 años. Además, la constante acción del agua sobre la roca modeló islotes y acantilados en el mármol.

A las cuevas de mármol se accede por Puerto Río Tranquilo, entre Cerro Castillo y Cochrane. En este sitio existe un embarcadero desde donde es posible tomar un bote hasta las cuevas. Los colores de estas cuevas son un verdadero espectáculo para el alma.

4. Naica en México, otra de las cuevas más asombrosas

La cueva de los cristales gigantes de Naica se encuentra en la ciudad de Chihuahua. Alberga cristales monumentales de selenita, también conocida como piedra de la luna por su brillo transparencia y color. Estos poliedros alcanzan 11 metros de altura y se entrecruzan de extremo a extremo en forma diagonal.

Se estima que la formación de dichos cristales es resultado de la humedad (95%), la temperatura (50°C) y los minerales característicos del lugar. Estos actuaron entre sí de manera lenta, durante más de un millón de años. La cueva de los cristales se encuentra a 300 metros de profundidad.

5. Cueva de Postojna, Eslovenia

La cueva de Postojna agrupa un complejo de grutas que suman en total más de 21 kilómetros de galerías. Para acceder a la cueva existen recorridos programados con guías, que tienen una duración aproximada de 90 minutos. La visita incluye un recorrido de 5 kilómetros, de los cuales 3,7 kilómetros se realizan en un tren y el resto a pie.

La cueva de Postojna tiene una antigüedad que supera los 35 millones de años y es visitada desde hace más de 200 años. En una sección de la cueva se realizan conciertos. Tiene capacidad para varios miles de espectadores y es un espacio surrealista del que han disfrutado lo eslovenos desde hace más de 100 años.

Uno de los lugares más llamativos es el Vivarium Proteus, que recrea las diferentes formas de vida que habitan la cueva. Cuenta con un área de investigación y otra de exhibición. Ambas profundizan en el conocimiento, difusión y protección de las especies que habitan allí. También explican los fenómenos físicos y químicos que se producen en su interior. Su majestuosidad es impresionante.