Un crucero por las aguas del lago Lucerna
El lago Lucerna no es uno más de los enormes lagos alpinos que jalonan todo el territorio de Suiza. Es, sin duda alguna, uno de los más hermosos y amplios, ya que sus aguas bañan hasta cuatro cantones de la Confederación Helvética. En fin, que navegar por él es una experiencia irrenunciable para todos los que viajan a Lucerna y desean hacer una excursión desde esta hermosa ciudad.
Algunos datos sobre el lago Lucerna
Se estima que en toda Suiza hay unos 7.000 lagos alpinos, todos ellos de origen glaciar. O sea, que tienen millones de años. Pues bien, uno de los más atractivos es el lago Lucerna, con sus 140 km² de extensión. Una superficie que alcanza unos 30 kilómetros de largo por más o menos 20 de ancho.
Y como hemos dicho, este lago baña cuatro cantones: el de Lucerna y los de Uri, Unterwalden y Schwyz. Por cierto, el nombre de Suiza, proviene del este último topónimo, por lo que se podría decir que aquí se halla el origen del país.
El lago se nutre de las aguas del río Reuss, que atraviesa la propia Lucerna y que tiene en el célebre Kapellbrücken, uno de los puentes más fotografiados de Europa. A unos metros de allí el río desemboca en el lago y sus aguas se extienden hacia el sudeste.
Por el lago navegan distintos cruceros que zarpan desde Lucerna. Unos itinerarios que se llevan haciendo desde hace casi dos siglos.
Los cruceros históricos de Lucerna
Conociendo la antigüedad de los cruceros por el lago Lucerna, ya podemos comprender la presencia de los atractivos buques a vapor en la zona. Unos barcos en los que llama la atención su aspecto vintage, ya que se desplazan gracias al movimiento de las enormes ruedas con paletas que llevan en sus laterales.
Desde el lago se pueden admirar bosques y picos alpinos, algunos con nieves perpetuas. Así, la experiencia de navegar en estas embarcaciones es fascinante. Más aún en los días soleados y sin viento, cuando el lago se convierte en un inmenso espejo en el que se reflejan las montañas.
Desde luego, es un inmenso placer disfrutar de esas vistas al mismo tiempo que se degusta la comida suiza en los salones de la elegante embarcación.
No obstante no son los únicos barcos en el lago Lucerna. También se puede optar por otros yates panorámicos más rápidos. Sin duda, una opción estupenda para los viajeros con más prisas y menos tiempo.
Un crucero por el lago Lucerna más excursión por el entorno
En los muelles de Lucerna hay numerosas posibilidades para embarcar. Hay distintos tipos de barcos turísticos, como ya hemos visto; diferentes horarios; hay posibilidad de comer o cenar, etc.
Además, hay cruceros que llegan hasta el final del lago Lucerna en Flüelen y regresan. Otros van hasta alguna de las más bellas poblaciones de sus orillas. Y algunos nos proponen excursiones combinadas que incluyen el ascenso a algunas de las montañas del entorno. Hay mucho para elegir:
Excursión al monte Rigi
Para hacer esta excursión deberemos desembarcar del crucero por el lago Lucerna en el puerto de Vitznau. Aquí comienza el primer tren cremallera, que se puso en marcha allá por el año 1871.
El ascenso hasta el punto más elevado es una maravilla. Pero todavía lo son más las vistas desde sus casi 1.800 metros de altura. Un emplazamiento que permite disfrutar de una extensa panorámica de la cordillera.
Excursión al monte Pilatus
Esta otra excursión nos lleva a un pico más alto, de más de 2.100 metros de altitud. Por ello, cuenta con el tren de cremallera más empinado del mundo, con un 44% de inclinación. Y este se complementa con un teleférico. Y todo ello para llegar al monte donde la leyenda cuenta que están los restos de Poncio Pilatos.
Descubrir a Guillermo Tell
Hablando de leyendas, el recorrido por el lago Lucerna y su entorno sirve, sobre todo, para conocer el célebre relato de Guillermo Tell. El gran héroe nacional escapó del tirano Gessler navegando por este lago. Luego lo mataría con su magnífica puntería para el tiro con arco.
En definitiva, que hacer un crucero por el lago Lucerna es la mejor forma de pasar un día en este rincón de Suiza. Una zona que, se mire donde se mire, siempre es espectacular.