Lago manchado en Columbia Británica, un mosaico natural

El lago manchado es un portento natural que está ubicado en Canadá. Allí existe una reserva indígena, por lo cual hay restricciones para el acceso a la zona. Sin embargo, a cierta distancia cualquiera puede disfrutar de ese paisaje único.
Lago manchado en Columbia Británica, un mosaico natural

Escrito por Edith Sánchez

Última actualización: 31 marzo, 2021

Conocido como Spotted Lake, lago Kliluk o lago manchado, este cuerpo de agua es sin duda una verdadera maravilla natural única en el mundo. Estamos hablando de un lugar fascinante que semeja la paleta multicolor de un artista, pero que cambia como si estuviera vivo.

La irregularidad de la geografía de este lago lleva a pensar que se trata de un escenario sacado de un cuento de hadas o que estamos frente a un paisaje extraterrestre. Asimismo, su extraordinaria belleza lleva a que sea visitado por turistas  de todas las latitudes, pero con ciertas restricciones.

En la actualidad es una reserva indígena con una connotación sagrada y ecológica, pero en el pasado cumplía con una función curativa para sus primeros pobladores. Durante la Primera Guerra Mundial, el lago desempeñó un papel protagónico para el Imperio británico.

Caracterización del lago manchado

El lago manchado se encuentra ubicado en el costado nororiental de la ciudad de Osoyoos, que forma parte del Valle de Okanagan en la Columbia Británica, Canadá. Se trata de un lago caracterizado por ser alcalino, debido a sus grandes concentraciones de sal.

Estas sales se encuentran estructuradas en forma de sulfatos de magnesio, calcio y sodio. Adicionalmente, el lago cuenta con otra serie de minerales, dentro de los que destacan el titanio y la plata.

Desde el punto de vista geográfico, el lago manchado se encuentra en lo que se denomina cuenca endorreica, es decir, una depresión que no cuenta con una salida fluvial en dirección al mar. Esto implica que el agua contenida permanezca allí y solo pueda reducir su nivel por evaporación o infiltración.

Formación y entorno

En general, los lagos se forman a partir de depresiones topográficas generadas por diversos procesos geológicos; el más común es el desplazamiento de las placas tectónicas. El agua que contiene un lago puede provenir de ríos, aguas freáticas o precipitación de lluvias.

En el caso del lago manchado, el agua contenida proviene exclusivamente de las lluvias. Esta es la razón por la cual el lago eventualmente llega a secarse por completo durante la estación de verano, como consecuencia de la evaporación del líquido.

El lago manchado se ubica en Columbia, Canadá.

Esta condición se ve potenciada porque el lago se encuentra en una región desértica, lo que finalmente determina que, en ausencia de agua, surja un inmenso salar. Tal factor contribuye a que exista una escasa población de fauna y flora en la zona.

El lago manchado está catalogado como el cuerpo de agua más mineralizado de todo el planeta. Durante el verano, puede dar lugar a más de 360 pocetas coloridas de bordes blancos, por donde es posible caminar para recorrer la zona a pie.

La magia del lago manchado

Aunque durante las estaciones de primavera y otoño el lago luce como cualquier otro, es durante el verano que la magia del lago manchado se hace evidente. Esto se explica en función de la evaporación paulatina del espejo de agua que se encuentra allí.

A medida que el nivel del líquido disminuye, aparecen formas circulares similares a pozos que empiezan a colorearse. Esto se debe a la variación en las concentraciones de sales y minerales presentes, las cuales van intensificándose a medida que el agua desaparece.

Este es un fenómeno sencillamente espectacular que permite presenciar distintos matices de azules, amarillos y rosas, entre muchas otras tonalidades. Además, representa una experiencia sobrecogedora que cambia dependiendo de la hora del día y de la cantidad de agua que haya.

El contraste cultural

Originalmente en la región ocupada por el lago manchado y sus alrededores habitaba el pueblo Okanagan Syilx, hace más de 3000 años. Para esta cultura, el lago siempre representó un lugar sagrado.

También era la farmacia de donde obtenían medicinas para tratar sus enfermedades que, además, complementaban con baños terapéuticos. El lago era tan importante que incluso durante los enfrentamientos bélicos con otras etnias los contrincantes acordaban treguas para acceder al lugar y así poder curar a sus heridos.

Con la invasión del Imperio británico, la población de los Okanagan Syilx fue diezmada y su territorio fue convertido en una gran explotación minera. Trabajadores de origen chino fueron reclutados y transportados hasta allí por los mismos británicos. De esta industria se extrajeron miles y miles de toneladas de minerales para ser comercializados.

Por otro lado, los minerales desempeñaron un papel protagónico durante la Primera Guerra Mundial. En esa etapa, fueron utilizados por los británicos para la fabricación de municiones durante este enfrentamiento atroz.

La apariencia del lago manchado es realmente llamativa.

Un contexto paradójico

Solo hasta el año 1979, el pueblo Okanagan Syilx, en alianza con otras etnias, pudo por fin recuperar un territorio de 22 hectáreas que había sido de su propiedad. Se lo compró a los mismos que se habían apropiado de sus tierras.

Probablemente, el anuncio de que en este lugar se construiría un balneario sirvió de detonante para que la comunidad se movilizara. Básicamente, pretendían la recuperación de este territorio sagrado.

Finalmente, es en este punto en donde hoy se encuentra el lago manchado como una reserva indígena. Este territorio está cercado con una valla, que funge como una barrera ingenua para protegerlo del exterior.

Aun así, es posible observar el colorido lago desde la carretera o la cerca y disfrutar de los milagros que tiene la naturaleza para mostrar. Para acceder a su interior, es necesario solicitar un permiso especial a la comunidad, que solo lo otorga en contadas excepciones.