5 curiosidades del oasis botánico de Londres

Este jardín botánico es uno de los mejores del mundo, y representa un espacio para descansar del ajetreo de Londres. Te presentamos 5 datos poco conocidos sobre este sitio.
5 curiosidades del oasis botánico de Londres
Cristina Moreno

Escrito y verificado por la historiadora del arte Cristina Moreno.

Última actualización: 27 febrero, 2021

El oasis botánico de Londres es uno de los jardines que más belleza atesoran en todo el mundo. Se encuentra situado a unos 14 kilómetros del centro de la ciudad, y también se lo conoce como Kew Gardens.

Pasear por este jardín es descubrir nuevas especies en cada paso y deleitarse con los colores de la naturaleza. ¿Te apetece vivir esa experiencia? Si es así, te interesará conocer lo siguiente sobre este jardín.

El oasis botánico de Londres

El espectacular oasis botánico es un enorme espacio de cerca de 120 hectáreas que supone uno de los pulmones verdes de Londres. En todo su recorrido, alberga la más abundante muestra de especies de todo el mundo y es el mejor jardín botánico que se puede visitar en todo el Reino Unido.

Está compuesto por diversas zonas y estructuras, como lagos, un arboretum con cerca de 14 000 árboles, pabellones e invernaderos.

En él, podrás apreciar plantas y árboles que van desde Madagascar hasta México, pasando por el Líbano, por ejemplo. Además, acoge un centro de investigación botánica, y el jardín en su totalidad es utilizado como lugar de aprendizaje para futuros jardineros.

5 curiosidades del oasis botánico de Londres

Más allá de su fama, el jardín botánico posee ciertas peculiaridades que no muchas personas conocen. A continuación, enumeraremos algunas de ellas:

1. El inicio modesto del oasis botánico de Londres

La creación de este importante jardín botánico data del año 1759, cuando la Princesa Augusta decidió plantar un pequeño jardín privado para la familia real. Sin embargo, con el transcurrir del tiempo, el jardín se ha convertido en una de las más bellas visitas de Londres.

2. Un bosque tropical en un invernadero victoriano

La Casa de la Palmera posee plantas traídas por exploradores.

Conocida como la Casa de la Palmera, este invernadero de estilo victoriano acoge un bosque de plantas tropicales, algunas de las cuales se encuentran en peligro de extinción. Entre ellas, árboles de cacao, caucho o agave o plantas como la Palma de Madagascar o azúcar de caña.

Esta Casa de la Palmera o Palm House fue construida en 1841 y su principal finalidad fue acoger las distintas plantas que eran traídas por los exploradores.

3. Arquitectura china en el corazón del oasis botánico de Londres

En el oasis botánico de Londres, podremos apreciar una estructura conocida como la Gran Pagoda, desde la cual podrás apreciar los jardines desde lo más alto. Esta estructura, que data de 1762, tiene una altura similar a 10 plantas y es un homenaje a la arquitectura de los edificios budistas.

La Gran Pagoda está considerada como una de las primeras estructuras que brindaba la posibilidad de ver Londres desde lo más alto. También cobra importancia por ser una las representaciones más fieles de la arquitectura china en el continente europeo.

En los alrededores de esta estructura, tendrás la posibilidad de visitar 3 espacios de contemplación, a modo de jardines japoneses con piedras, arbustos y cascadas. Se trata de unos espacios concebidos como lugares de refugio, paz y armonía.

4. La flor más grande del mundo, en Londres

En el Kew Gardens de Londres, podrás admirar el «aro gigante», conocida por ser la flor más grande del mundo. Estamos hablando de una especie que puede llegar a pesar más de 90 kilos.

En el oasis botánico de Londres se puede apreciar la flor más grande del mundo.

El explorador Odoardo Beccari fue quien trajo esta flor al viejo continente, precisamente al oasis botánico de Londres. La curiosidad de este explorador lo motivó a llevar consigo las semillas de esta flor desde Indonesia.

En un principio, algunas semillas germinaron, pero a otras les costó mucho tiempo, lo que dejó un sinsabor en Beccari. Y es que las flores que nacieron no se parecían en nada a la imagen que él guardaba de los ejemplares que apreció en Indonesia. Sin embargo, transcurridos 11 años, las flores cadáver, como también se conocen, comenzaron a poblar el jardín botánico de Londres.

5. La Colmena, una visita obligada en este oasis

Finalmente, tampoco debes perder la oportunidad de visitar una de las zonas más bellas de todo el conjunto, La Colmena. Se trata de una estructura de 17 metros que cuenta con 1000 luces LED, dispuestas para recrear una colmena de abejas.

La estructura se conecta con colmenas reales que podemos encontrar en el parque. En las que podrás contemplar miles de abejas haciendo su trabajo. El movimiento de las abejas provoca que las luces de la estructura se enciendan y apaguen y, con ello, provoquen un espectáculo sensorial maravilloso.

Con todo lo anterior, sin duda, la visita al oasis botánico de Londres se convertirá en un recuerdo inolvidable de tu viaje por la capital del Reino Unido. Es uno de esos lugares que no puedes perderte al pasear por esta ciudad.